Tantas son las alternativas existentes en materia de transporte que no resulta suficiente con hacer una aproximación general al concepto. Por eso, como se advierte al repasar el archivo de Tipos.com.mx, hemos abordado la noción desde la oferta terrestre, marítima y aérea, así como también hicimos alusión al transporte pasivo y al transporte de carga. Hoy, para complementar la información anterior, aportaremos datos de interés sobre el transporte internacional.

En esta última categoría aparecen opciones de traslado que superan los límites de una superficie nacional ya que se unen dos puntos (uno de salida y otro de destino) pertenecientes a distintos países.

De acuerdo a qué se traslade y cómo se complete el proceso, se pueden reconocer propuestas como las de transporte internacional de mercancías y transporte internacional de pasajeros. Asimismo, hay compañías especializadas en el transporte internacional de animales, un servicio que requiere compromiso y una gran responsabilidad para garantizar el bienestar de los ejemplares durante el trayecto. De igual modo pero con otras precauciones para garantizar la entrega de los productos en buenas condiciones, existen transportes internacionales especializados en carga refrigerada.

La forma de llevar a cabo el viaje en función de las distancias y las características de las naciones involucradas, también son cuestiones que influyen al momento de encuadrar el servicio en una categoría específica. Hay transportes internacionales por vía terrestre (por carretera), transporte internacional por vía aérea y transporte internacional por vía marítima, además de la opción de utilizar el sistema ferroviario para concretar un traslado internacional.

Quienes se especializan en Contabilidad definen como asiento contable a cada registro o anotación que se incluye en el Libro Diario. De acuerdo a los especialistas, en la organización de partida doble los asientos contables abarcan tanto el debe como el haber, razón por la cual influyen tanto en el activo como en el pasivo de una persona o empresa.

De acuerdo a cómo surjan y qué particularidades posean, los asientos contables se clasifican de diferentes maneras.

De tener en cuenta su fondo, se los podrá catalogar, según corresponda, como asientos operativos del ejercicio (aquellos que se ordenan de manera cronológica para reflejar cuáles han sido las operaciones con importancia contable a lo largo de un determinado periodo), asientos de ajuste (para añadir movimientos pendientes o correcciones sobre cuestiones advertidas al finalizar un cierto ejercicio), asientos de regularización (para saldar y cerrar tanto de ingresos como de gastos e incluir dicha información a la cuenta de resultados) y asientos de cierre (registros que se utilizan para darle un cierre a toda cuenta que posea saldo al término de cada periodo).

Cabe resaltar que, así como al iniciar un ejercicio, se apela a los asientos de apertura, al finalizarlo adquieren relevancia los asientos de cierre.

Por otra parte, es posible diferenciar a los asientos contables por su forma, ya que hay asientos simples (en los cuales aparece sólo un par de cuentas) y asientos compuestos (donde se superan las dos cuentas, con posibilidades ilimitadas) que se reflejan en comprobantes de diario con diferentes características.

Como parte de las medidas de seguridad, en la actualidad los automóviles incluyen un dispositivo que se conoce con el nombre de airbag (“bolsa de aire”, tal su traducción al español).

El propósito de este elemento que se acciona en caso de accidente, cuando se produce un impacto fuerte, es amortiguar la violencia del choque para proteger a los ocupantes del vehículo frente a los golpes. El uso del cinturón de seguridad es clave en estos contextos porque de nada sirve que se active el airbag si quienes viajan en el coche salen despedidos por la violencia de la colisión.

En relación a estos productos, se reconocen airbags delanteros (brindan protección, en caso de un choque de frente, en la zona del volante y el parabrisas, así como también al acompañante), airbags laterales (se activan desde el costado del asiento para resguardar la parte del tórax), airbags de cortina (se ubican en el techo, cerca de las ventanillas y al inflarse protege la cabeza aunque no está disponible en todos los modelos de autos) y, desde hace relativamente poco tiempo, se distinguen también los airbags para preservar las piernas de los automovilistas evitando daños por el choque contra la palanca de cambios, por ejemplo).

Hay vehículos, además, que ofrecen como medidas de seguridad airbags posteriores (en caso de embestidas bruscas que impacten en el sector trasero) y airbags centrales (evitan que dos o más acompañantes se golpeen entre sí). Los desarrollos automotrices más recientes, además, incorporan como opciones alternativas más específicas, como el airbag para los cinturones de seguridad y los airbags que se inflan en la zona delantera del coche del lado de afuera para, en caso de que se atropelle a alguien, la víctima vea amortiguado el golpe contra el parabrisas.

Los transportes que se trasladan por aire a diferentes alturas reciben la denominación genérica de aeronave.

Dentro de esta clasificación se advierten otras categorías que dan cuenta de las diferentes características que poseen los vehículos que se desplazan, con velocidad variable, por el cielo o la atmósfera.

Hay aeronaves, por ejemplo, que se conocen como aerostatos. Se trata de unidades que consiguen elevarse a partir del denominado Principio de Arquímedes y flotan o se elevan porque poseen una cierta cantidad de un gas menos denso que el aire de la atmósfera. A modo de referencia se pueden señalar como parte de este segmento a los globos aerostáticos y a los dirigibles.

Las aeronaves catalogadas como aerodinos tienen la particularidad de tener un peso mayor respecto al aire y lograr sustentación por medio de fuerzas aerodinámicas. Los helicópteros, el parapente y los aviones integran este grupo junto a otros medios de transporte. Cabe resaltar que los aerodinos pueden tener alas fijas o bien ser aeronaves de alas rotatorias o de alas móviles.

De buscar datos más precisos para conocer mejor a las aeronaves, podremos hacer foco en las clasificaciones de aeronaves históricas (donde figuran unidades que, por alguna cuestión puntual, cobraron relevancia a lo largo de la Historia), aeronaves eléctricas, aeronaves militares, aeronaves experimentales, aeronaves civiles, aeronaves de uso presidencial, aeronaves de seguimiento, aeronaves subsónicas (aquellas que tienen una velocidad de vuelo menor a la velocidad que alcanza el sonido) y aeronaves supersónicas (vehículos que, al volar, llegan a avanzar más rápido que el sonido), por indicar otras categorías que demuestran la amplia variedad de aeronaves que existe a nivel general.

En el campo de la tecnología se conoce como aerogenerador a un dispositivo capaz de convertir, por medio de rotores de palas, la energía eólica (es decir, del viento) en energía eléctrica.

La ubicación del eje de rotación, la potencia, la tecnología utilizada y su mecanismo son parte de las variables que permiten marcar las diferencias que pueden llegar a surgir entre un equipo y otro. A modo informativo, a continuación detallaremos algunas modalidades que demuestran la diversidad existente en materia de aerogeneradores.

A la hora de analizar la oferta al respecto, encontramos por ejemplo que hay aerogeneradores de eje horizontal y aerogeneradores de eje vertical (Darrieus, Panémona o Savonius), cada uno con sus propias particularidades, ventajas y desventajas. Hay, asimismo, aerogeneradores eólicos de alta altitud, que se caracterizan por funcionar a partir de una turbina que no requiere una torre para tener un apoyo sino que permanece suspendida en el aire para aprovechar corrientes de aire a grandes altitudes.

Al profundizar la búsqueda de alternativas adquieren relevancia también los aerogeneradores a barlovento (sus rotores se ubican frente al viento) y los aerogeneradores a sotavento (orientados para el lado contrario de donde llega el viento), además de los aerogeneradores de una, dos, tres o más palas (algunos modelos americanos de aerogeneradores, por ejemplo, incluyen multipalas y se utilizan para extraer agua a partir de pozos realizados en áreas de llanura).

Por último, resulta interesante mencionar que existen propuestas en Internet que alientan a desarrollar aerogeneradores caseros, aunque para lograr un resultado efectivo es fundamental dominar los principios básicos de la energía y saber qué es, cómo funciona y para qué sirve un aerogenerador.

Se conoce con el nombre de ají a una planta cuyo fruto es comestible. Este producto, de acuerdo a la región del mundo en el cual se lo mencione, puede ser definido también como pimiento o como chile y ser consumido a partir de diferentes presentaciones y combinaciones.

Existe una variedad, bautizada como ají cumbarí, que se caracteriza por su tonalidad rojiza y ser muy picante, pero las opciones a la hora de condimentar una comida no se limitan a este fruto.

El ají amarillo, típico de la gastronomía peruana, es otra posibilidad. Este alimento recibe en suelo chileno la denominación de ají cristal y es aprovechado no sólo para dar sabor sino también como colorante. De hacer foco en la cocina de Perú, podremos reconocer además una preparación a base de caldo de gallina, crema, papas o arroz, entre otros ingredientes, denominada ají de gallina.

El ají molido o ají en polvo, por su parte, se obtiene al moler el fruto (ya en estado seco) de una o más plantas de la familia Capsicum.

De buscar otras alternativas para cocinar y lograr platos con sabores y colores diversos (como ajíes en vinagre, ajíes rellenos, salsa de ají, ajíes agridulces, ajíes caramelizados, ajíes criollos, etc), se podrá tener en cuenta al ají morrón o ají dulce, al ají panca (también bautizado como ají limo), al ají japeño (o chile jalapeño) y al ají turco (fruto que además de servir para la gastronomía posee utilidades medicinales), por señalar algunos más a modo de referencia.

Desde hace varios años se practican numerosas disciplinas a nivel mundial que, si bien hoy en día se relacionan al deporte y a los métodos de defensa personal, en la antigüedad formaban parte de las técnicas de lucha propias del Extremo Oriente. Se trata de las artes marciales, acerca de las cuales vamos a ofrecer información en este artículo para orientarlos y ayudarlos a reconocer diferencias entre una y otra actividad nucleada en este conjunto.

En primer lugar, resulta interesante tener presente que las artes marciales tienen distintos orígenes. Hay disciplinas coreanas, japonesas y chinas.

El taekwondo, por ejemplo, es un arte marcial coreano que contempla golpes de pie y puño, además de saltos y giros. En este marco se reconocen dos sistemas técnicos: uno bautizado como International Taekwon-Do Federation (I.T.F.) y otro llamado World Taekwon-Do Federation (W.T.F.).

El kung-fu, por su parte, es un arte marcial procedente de China que presenta similitudes con el karate (un sistema de combate japonés).

El aikido, en cambio, es un arte marcial originado en Japón que propone aprovechar la energía del oponente para vencerlo. En esta disciplina posee relevancia el sentido del Ying y el Yang, pero también el sentido del poder mental para lograr la defensa personal haciendo uso de la fuerza del atacante. También es de origen japonés el judo o yudo, un método de lucha con esencia estética que se subdivide en tres modalidades de acuerdo al modo de desarrollar las técnicas con distintas finalidades.

Al buscar más clases de artes marciales aparece también el jiu-jitsu (Ju-jutsu), entre otras alternativas que dan cuenta de la diversidad existente en materia de artes marciales.

A fin de evitar dolores en un paciente que va a ser sometido a una intervención quirúrgica o molestias propias de una práctica médica, se utiliza anestesia.

Hay distintas metodologías y variedades a la hora de aplicar la sustancia que “adormecerá” una parte del cuerpo o que llevará al individuo a un estado de inconsciencia de manera controlada mientras dura el procedimiento médico: cuál elegir y cómo administrarla depende de cada caso.

Cuando se necesita trabajar sobre un área concreta y no es necesario dormir al paciente, se apela a la anestesia local. Así sucede, por ejemplo, en ciertas prácticas de Oftalmología, Ginecología, etc. Para tal efecto hay cremas, geles y soluciones inyectables.

Al acudir a un consultorio odontológico para realizar un tratamiento bucal, por ejemplo, el profesional apela a la anestesia local para relajar al paciente y evitarle dolores propios de la práctica a realizar sobre una pieza dental.

La anestesia locorregional, por su parte, tiene mayor alcance porque no sólo quita la sensibilidad de una zona sino que también permite abarcar un poco más de estructura. Esta alternativa, a su vez, se segmenta en anestesia troncular, anestesia neuroaxial (epidural o intradural) y anestesia regional intravenosa.

En muchos partos, por ejemplo, se le administra a la mujer a punto de dar a luz anestesia epidural para favorecer su relajación y quitarle los dolores para que pueda disfrutar de tan importante momento.

La anestesia general, en cambio, duerme todo el cuerpo por tiempo determinado. Puede administrarse a partir de una vía intravenosa, por inhalación o combinando ambas propuestas. Cuando se combinan las técnicas, se hace alusión a la anestesia multimodal.

Se define como amortización al acto y la consecuencia de amortizar, es decir, de compensar o recuperar la inversión.

Se trata de un concepto utilizado en las áreas de Contabilidad y Economía que se asocia con un valor, ya sea en materia de activo o dentro de la categoría de pasivo. A fin de proporcionarles datos de interés sobre esta noción evitando las definiciones complejas que sólo aportan confusión, a continuación describiremos distintas clases de amortizaciones.

La amortización financiera, por ejemplo, se desarrolla cuando se registran reintegros graduales de una deuda. Cuando alguien gestiona un préstamo bancario, por ejemplo, asume la obligación de reembolsar esa suma de dinero con pagos distribuidos en el tiempo. Los montos que se cancelan a través de cada pago (bajo condiciones que se establecen de manera específica en base a un método puntual), están considerados como amortizaciones.

La amortización económica o técnica, por su parte, le otorga relevancia a la idea de fondo de amortización, tal como se identifica a aquellos que se ofrecen a fin de equilibrar la depreciación o desvalorización de determinados patrimonios.

De buscar mayores precisiones sobre las variedades que dan cuenta de la diversidad existente en cuanto a amortizaciones, aparecerán como opciones las amortizaciones libres, las amortizaciones constantes o de cuota fija, las amortizaciones aceleradas, las amortizaciones variables, las amortizaciones progresivas, las amortizaciones de progresión aritmética decreciente, las amortizaciones degresivas con porcentaje constante en relación al valor que se amortizará y las amortizaciones degresivas por sumatoria de dígitos, por citar algunas a modo de ejemplo.

Los profesionales de la salud incluyen dentro del concepto de autismo a un amplio espectro de trastornos que afectan diversos aspectos de la vida del sujeto. Se lo puede abordar como un síndrome que se manifiesta por la imposibilidad de interactuar a nivel afectivo y verbal con diferentes individuos o bien como un síntoma de orden esquizofrénico basado en hacer referencias sistemáticas al propio individuo respecto a los acontecimientos que lo rodean.

Existen, de acuerdo a los expertos, varias categorías para encuadrar estas patologías asociadas al autismo. Hay casos de incapacidades referidas a la expresión no verbal y a la interacción con el medio que, por no estar acompañados de otras evidencias del desorden habitual, se diagnostican como autismos atípicos. En ocasiones, este cuadro está vinculado a un cierto grado de retraso mental.

De buscar otras clasificaciones que ayuden a comprender mejor las interpretaciones médicas, podremos aprender cuándo se hace alusión, por ejemplo, al autismo de alto funcionamiento. Según se advierte al indagar sobre el tema, se trata de una expresión informal que abarca a los pacientes con autismo que reflejan mayores capacidades respecto a otros con sus mismas condiciones.

El autismo tipo Asperger, en cambio, nuclea a múltiples trastornos de conducta y dificultades mentales que repercuten de modo negativo en la interacción social y llevan a repetir conductas. Este diagnóstico difiere del de autismo infantil temprano ya que, en los casos de pacientes con Asperger, no hay en ellos retrasos en la evolución de las habilidades del lenguaje y se advierte una conservación general del nivel de inteligencia.