Si uno tiene presente la teoría y analiza los usos prácticos del concepto de universo, no tardará en advertir el amplio y diverso alcance de esta noción que puede vincularse a cuestiones propias de la Cosmología, las Artes y las Matemáticas, por ejemplo.
Así como existe la realidad, por ejemplo, hay universos ficcionales, un marco en el cual podemos distinguir a los universos paralelos. En este contexto tenemos la posibilidad de diferenciar a los universos fantásticos, a los universos propios de las historietas y aquellos asociados a la ciencia ficción, por enumerar algunas alternativas comunes que también pueden llegar a nuclearse en un universo compartido si hay dos o más obras que transcurren con escenarios o personajes iguales. Al profundizar en estas categorías es importante tener en cuenta que existe en Física una hipótesis bautizada como Universos Paralelos relacionada a la existencia de múltiples realidades en cierta parte independientes respecto a otros universos.
La cosmología física, por su parte, nos invita a aprender, por ejemplo, que dentro del universo total existe un universo observable, es decir, una pequeña porción de toda esa inmensidad que resulta visible y que, por lo tanto, puede ser estudiada y utilizada como referencia para sacar conclusiones sobre el universo completo.
La hipótesis que presenta al Universo de Energía Cero, el modelo cosmológico definido como universo ecpirótico, la teoría del profesor Richard Tolman conocida en español como Universo Oscilante, el universo constructible propio de la Teoría de Conjuntos son otras clasificaciones que demuestran el amplio y diverso alcance de este término.