Un pañuelo es un elemento con múltiples usos que se comercializa en diversas variantes para adaptarse tanto a la edad y género de quien lo utiliza así como también al contexto en el que es empleado.

Dice el diccionario de la Real Academia Española (RAE) que un pañuelo es un trozo pequeño de tela de formato, por lo general, cuadrado, destinado a la higiene (con él se suele secar el sudor y sirve para mantener limpia la nariz). También, que es un accesorio que los hombres suelen llevar en uno de los bolsillos de sus sacos como detalle decorativo y que las mujeres acostumbran lucir en sus cabezas y/o alrededor de sus cuellos. Estos últimos, entendidos como piezas de moda, no son cuadrados sino triangulares y poseen relevancia internacional a nivel cultural y religioso: las mujeres islámicas y aquellas que profesan el judaísmo ortodoxo, por citar casos concretos, suelen llevar pañuelos sobre sus cabezas.

Hay, por lo tanto, una amplia variedad de pañuelos. Para obtener un panorama general acerca de estos objetos, a los ya citados pañuelos de bolsillo se pueden agregar como alternativa los pañuelos descartables (son de papel y se utilizan sólo una vez), los pañuelos de hierbas (tal como se conoce a aquellos de tonalidad oscura que exhiben diferentes estampados y suelen ser más grandes que los comunes), los pañuelos de castigo (expresión empleada en fútbol americano para describir a las banderas de penalización), los pañuelos de seda y los pañuelos de lana, aunque las opciones no se limitan a las mencionadas.

En el plano musical se define como piano a un instrumento de cuerdas percutidas que está compuesto por teclas y una caja de resonancia. Los expertos en cuestiones geográficas, en cambio, cuando mencionan esta palabra no suelen hacer referencia al objeto ejecutado por los pianistas sino a una localidad francesa situada en la zona de Córcega.

De hacer foco sólo en la acepción centrada en la música, descubriremos que a lo largo de la historia han existido múltiples clases de pianos. Las variedades, muchas de las cuales aún pueden apreciarse en la actualidad, incluyen a los pianos de cola (que, a su vez, pueden segmentarse de acuerdo a sus tamaños y particularidades en pianos de media cola, pianos de cola mignon, pianos de un cuarto de cola, pianos de tres cuartos de cola y pianos de gran cola), a los pianos verticales (los cuales pueden clasificarse como espinetas, consolas, de estudio o antiguos en función de su estructura, medida y detalles) y a los pianos electrónicos, entre otras variantes.

Cabe resaltar además que a partir de este instrumento musical surgieron numerosos productos inspirados en sus rasgos distintivos. Los pianos de juguete, la pianola, los pianos acústicos, los denominados pianos preparados, los llamados pianos jirafa, los pianos con pedales, los pianos rectangulares y los pianos eléctricos (como el caso del Fender Rhodes, un piano que se fabricó con la idea de que pudiera resultar cómodo y ser fácil de trasladar) son algunos de los elementos que permiten apreciar el alcance que ha tenido, y aún tiene, el piano.

Con origen en el vocablo latino patrōnus, la palabra patrón posee en español múltiples acepciones reconocidas de manera oficial a través del diccionario de la Real Academia Española (RAE).

Patrón, dice la teoría, es tanto el nombre que se le da a cada uno de los santos venerados por las personas de fe (San Cayetano, por ejemplo, es el Santo Patrono del Trabajo), como así también todo individuo que tiene a su cargo un empleado. Se considera patrones, asimismo, a las personas protectoras y a los elementos que sirven de molde para realizar objetos idénticos al original.

Al tener muchos significados distintos, es posible identificar a varias clases de patrones, algunas de las cuales mencionaremos a continuación con el propósito de ayudarlos a ampliar sus conocimientos generales.

Para manejar ciertas embarcaciones, por ejemplo, es necesario tener el título habilitante como patrón de yate, patrón de navegación básica y patrón de embarcaciones de recreo. La noción de patrón oro, en cambio, refiere a un sistema cambiario que se basa en una equivalencia reglamentada desde el plano legal para fijar el cambio de una moneda por una cantidad específica de oro.

Además de los mencionados líneas arriba, hay patrones de costura (empleados por quienes realizan tareas de corte y confección), patrones de diseño (generalmente utilizados por quienes desarrollan software), patrones abstractos (concepto que engloba a los moldes o reglas que al ser genéricas pueden aplicarse para diversos asuntos) y patrones de medida (destinados a la medición de diversas clases de magnitudes), entre muchos otros.

Frente al acto y consecuencia de optimizar, es decir, de mejorar o perfeccionar una cosa o proceso, se habla de optimización.

Hoy en día, este concepto posee un alcance amplio y múltiples interpretaciones ya que forma parte de expresiones e ideas propias de los ámbitos de la Matemática y la Informática, por citar algunas de las disciplinas donde resulta relevante.

Los matemáticos, por citar un caso puntual, hablan de optimización cuando necesitan resolver problemas y determinar los puntos más bajos y los máximos de una determinada función. De acuerdo a cómo se aplique el proceso y las características que tenga, se hablará de optimización combinatoria; optimización multiobjetivo; optimización de topología multifase; optimizaciones clásicas; optimizaciones estocásticas; optimizaciones con información no perfecta y de optimizaciones con restricciones de desigualdad.

Quienes se especializan en cuestiones informáticas, en cambio, hablan con frecuencia de la optimización de consultas (cuando necesitan perfeccionar un sistema de gestión de bases de datos de carácter relacional para agilizar el tiempo de respuesta), de las optimizaciones prematuras (tal como se define a los cambios que un programador hace sobre un software para adelantarse a eventuales temas de tiempo antes de tener terminado el diseño en cuestión), de las optimizaciones SEO (también conocidas como posicionamiento web o como optimización de motores de búsqueda, una estrategia que busca mejorar la ubicación de una página web para que aparezca lo más adelante posible en las páginas de los buscadores) y/o de la optimización de software (tarea basada en la adaptación y perfeccionamiento de un programa preexistente para que el trabajo que realiza pueda concretarse en el menor tiempo posible).

Los bioquímicos suelen definir como péptido a toda molécula conformada por la unificación de carácter covalente de un mínimo de dos aminoácidos. De acuerdo a la cantidad de aminoácidos enlazados y a las particularidades de cada una de estas moléculas, los expertos manejan diversos conceptos que permiten establecer con precisión de qué clase de péptido se trata sin necesidad de analizar el enlace de inmediato.

Si bien desde este espacio no ahondaremos al respecto para evitar confusiones o citar vocablos complejos para quienes no dominan la temática, sí describiremos las variedades de péptidos con el propósito de orientarlos en esta cuestión.

De considerar la cantidad de aminoácidos que intervienen, por ejemplo, se habla según corresponda de oligopéptido (cuando el número es menor a la decena), polipéptido (comprende enlaces de hasta aproximadamente cien aminoácidos) y proteínas (cuando se unen más de cien aminoácidos).

Asimismo, hay péptidos antimicrobianos (tal como se considera a las proteínas que se obtienen de manera natural y se destacan por sus efectos antibióticos) que se encuadran en el conjunto de los péptidos de síntesis ribosomal, donde pueden a su vez ser segmentados, de acuerdo a la estructura que posean, en péptidos de estructura beta, péptidos de estructura extendida y péptidos de estructura a-hélice. Otros, en cambio, surgen por acción de hongos y bacterias y se enmarcan en el grupo de los péptidos de síntesis no ribosomal.

Además de los mencionados líneas arriba, señalan los expertos, hay péptidos denominados como inhibidores gástricos; péptidos de raíz opioide; péptidos miméticos y polipéptidos pancreáticos, entre otros.

Las paredes son una especie de muro de dimensiones variables que construyen los albañiles de forma vertical (valiéndose de elementos como los ladrillos, las piedras y el yeso) con el propósito de cerrar, limitar y/o dividir superficies. Esta palabra que tiene su origen en el latín parĭes, además, sirve para denominar a cualquier clase de placa que permite delimitar un ambiente.

Cabe resaltar por otra parte que, en el ámbito deportivo, este término se suele usar para identificar a una jugada entre integrantes de un mismo plantel. Si dos futbolistas, a fin de evitar que los contrarios les quiten la pelota, arman la estrategia de pasarse el balón uno al otro y el segundo la devuelve metros más adelante al primero para ganar espacio y sortear la marca de los rivales, entonces se habla de que ambos “hicieron una pared”.

Quienes se dedican a la Biología, en cambio, aprovechan la idea de pared para describir como pared celular a la cobertura de cierta rigidez que se observa en células de tipo vegetal y procariontes.

De hacer foco en el vocabulario de los arquitectos y trabajadores de la construcción, entonces se podrá conocer el significado de expresiones como pared de cultivo (tal como se conoce a las estructuras verticales cubiertas de enredaderas y distintas plantas), pared de fábrica, pared horma, pared escarpada, pared maestra, pared atizonada, pared de guarismo, pared colgante, pared testera, pared de cerca y pared medianera, entre muchas otras que aluden a diferentes modalidades y variantes de paredes que se levantan de acuerdo a necesidades específicas.

El concepto de peso posee múltiples acepciones, tal como se advierte al consultar el diccionario de la Real Academia Española (RAE). De acuerdo a esos datos, este vocablo derivado del término latino pensum refiere a la fuerza que le permite a nuestro planeta atraer objetos y al poder que, en este mismo sentido, tienen los cuerpos celestes sobre una cierta masa. Cuando se trata de mencionar estas potencias, se utiliza al peso como magnitud de carácter físico. De determinar el peso de una persona, por ejemplo, se apela a la unidad kilogramo: «María pesa 45 kilogramos».

Asimismo, peso es la unidad que rige en ciertos países como moneda (tal como ocurre en Argentina, Uruguay y Chile) y una palabra que sirve para describir el dolor o la responsabilidad que un individuo asume (“Al finalizar el tratamiento, me saqué un peso de encima”).

A partir de estas definiciones, es posible identificar un gran número de pesos que no sólo forman parte de distintas expresiones sino que también se emplean en contextos diferentes.

En Química, por ejemplo, es frecuente hacer referencia al peso atómico y al peso molecular, mientras que en el ámbito del boxeo es usual que los deportistas sean agrupados, en función de su peso, en las categorías de peso wélter, peso pluma, peso gallo, peso mosca o peso pesado, según corresponda.

Otras nociones derivadas del concepto de peso que contribuyen a ampliar los alcances del término: Peso troy, peso muerto, peso específico, peso neto, peso bruto, peso corrido, peso de artifara, peso de cruz y peso ensayado.

La palabra pez tiene su origen en el vocablo latino piscis y se utiliza, en general, para describir a los animales dotados con branquias y aletas cuyos organismos cubiertos por escamas. Estos seres vertebrados de tamaño variable viven en entornos acuáticos, aunque no todos los integrantes de esta numerosa familia tienen los mismos hábitats y formas de vida.

A fin de ayudarlos a conocer mejor a los peces, hoy resaltaremos desde este espacio las variedades más fáciles de identificar a nivel mundial. Así, pues, sin necesidad de investigar demasiado ni esforzarse por descifrar conceptos complejos podemos establecer que hay numerosas especies que viven en el mar (catalogados como peces de agua salada) así como aprender también que hay peces de agua dulce y ciertas familias que se reconocen como peces de acuario.

A partir de esta clasificación, es posible comenzar a distinguir muchos otros tipos de peces, entre los cuales se pueden mencionar a los tropicales, a los peces planos, a los peces óseos (categoría que se subdivide a su vez en peces de aletas radiadas y peces de aletas lobuladas), a los peces cartilaginosos, a los peces carentes de mandíbulas y a los peces limpiadores.

Cabe resaltar, por otra parte, que muchos ejemplares pueden enmarcarse en más de una categoría, tal como ocurre con los peces migratorios. Dentro de este grupo, cuentan aquellos que se especializan en Zoología, hay varias familias de peces que habitan aguas saladas durante gran parte de su vida pero se trasladan a zonas de agua dulce para aparearse y viceversa.

Se define como origami a una técnica artística que, si bien se originó en Japón, hoy en día se aplica en diversas partes del mundo. Se trata de una práctica artesanal en la cual sólo se emplean las manos y uno o más trozos de papel con el propósito de lograr toda clase de figuras.

Esta propuesta, también conocida con el nombre de papiroflexia, se ramifica en varias categorías de acuerdo a las características del resultado final, que puede ser desde la figura de un pez o una rana hasta un avión, una flor o un cuerpo geométrico, por citar algunas alternativas. Por esa razón, en esta oportunidad haremos foco en las distintas posibilidades que ofrece el origami con el objetivo de ayudarlos a ampliar sus conocimientos al respecto.

Existe, por ejemplo, el denominado origami de acción, el cual tiene la particularidad de desarrollar piezas con partes movibles. Para conseguir ese resultado, se suelen armar módulos en donde con sólo tirar o presionar sobre una zona produzcan un movimiento determinado.

Otros, en cambio, cultivan el arte del origami modular (técnica que invita a juntar figuras iguales entre sí para conformar una única pieza que exhiba profundidad y posea una cierta complejidad que le permita funcionar como objeto decorativo), así como también hay quienes prefieren trabajar con la opción del plegado en húmedo para moldear mejor la materia prima. Por último, resulta interesante mencionar además al estilo pureland, una metodología que sólo contempla el uso de pliegues simples, de a uno por vez.

La palabra paro puede entenderse de diversas maneras y derivar de vocablos específicos que varían según qué tipo de paro se mencione. Por esa razón, hemos recopilado datos interesantes para ayudarlos a aprender más sobre los orígenes y alcances de este término.

En primer lugar, hay que decir que si una mujer lo aprovecha para hacer mención a su propio acto de parir, entonces se trata de una noción originada en el vocablo latino părus que, a su vez, está vinculada a la raíz parĭo.

Fuera de ese contexto, paro es la denominación genérica que reciben los pájaros que poseen alas de apariencia redondeada, cola alargada y pico poderoso con forma recta. En plural, en cambio, puede llegar a aludir a los nativos de la isla griega de Paros.

De usarse para indicar el cese de una actividad o referir al acto de parar algo, entonces puede funcionar como sinónimo de huelga y ramificarse en diversas categorías. A nivel social, es común hablar de paros generales, paros docentes, paro por tiempo indeterminado, paro de recolectores o de paro de transporte, según cómo, en dónde y quiénes decidan desarrollar la interrupción de un servicio o labor. Sin embargo, cuando se hace referencia a un paro cardiorrespiratorio no se resalta un reclamo de trabajadores sino de un episodio diagnosticado por un médico que consiste en la suspensión de la respiración y la detención de los latidos del corazón como consecuencia de la falta de llegada de oxígeno a la zona cerebral y la interrupción de la circulación sanguínea.