Desde hace unos años se popularizó a nivel internacional, aún en los países de habla hispana, el término ‘piercing’, una expresión inglesa que hace referencia a la decoración del cuerpo humano con aros de formas, materiales y tamaños diversos. Para lucirlos, el individuo debe perforar su piel.

Aunque hay muchos que se oponen a esta costumbre de modificar el aspecto corporal con aros, quienes defienden esta práctica aseguran que el piercing es algo más que una moda: para ellos es una alternativa que, como los tatuajes, sirve para reflejar necesidades personales y valores culturales, religiosos, etc.

Quien se siente cautivado por los piercing y los hace parte de su look para marcar su estilo puede optar por los piercing de cara (con la posibilidad de ubicar uno o más aros en la ceja, en la nariz, en la lengua, en el labio y en las mejillas), los piercing de oreja (ya sea en el lóbulo o en alguna parte del cartílago) y los piercing del resto del cuerpo.

Sobre esta última posibilidad, hay que decir que no existen límites para quienes sienten fascinación por los piercing. Si bien los más habituales son los del ombligo, los más osados ya han pasado por la experiencia de llamar la atención con aros en la nuca, en alguno de sus dedos y en sus partes más íntimas. Sí, aunque resulte difícil de entender, hay quienes se animan a colocarse piercings elaborados en acero quirúrgico o titanio en los pezones y en sus genitales.

El perro es un animal que acompaña al hombre desde tiempos remotos. Este mamífero que pertenece a la familia de los cánidos es dueño de una gran inteligencia y ha desarrollado una profunda lealtad hacia el hombre, razón por la cual numerosos seres humanos los consideran parte de sus núcleos familiares.

A la hora de optar por un perro como mascota, es posible elegir ejemplares de distintas características y orígenes. Algunos, prefieren sumar al hogar a un perro callejero de cualquier edad sin importar su pureza por el simple deseo de protegerlo y proporcionarle afecto, pero otros se interesan por los de raza por priorizar la genética, la seguridad de conocer el pasado del animal y el aspecto.

En relación a las castas caninas hay que decir que hay numerosas formas de agrupar a los perros. Para facilitar el reconocimiento de estos animales, el hombre ha optado por armar una clasificación específica según sean las particularidades más sobresalientes del conjunto, su estado y su procedencia.

Así, entonces, se puede hablar de razas caninas extintas, razas poco frecuentes, razas peligrosas, razas hipoalergénicas, razas de perros de compañía, razas de perro de caza y razas de perros guía, entre otras.

Entre las castas que ya parecen haber quedado perdidas en el tiempo se pueden citar al pastor chiribaya y al perro polar argentino, mientras que el grupo de perros no tan populares a escala internacional está compuesto por razas como podenco ibicenco, dandie dinmont terrier y berger picard. Asimismo, se ha popularizado en el mundo un listado de razas que, por temperamento y tendencia a la agresividad, pueden ser peligrosas. En este grupo aparecen el pitbull, el dogo argentino y el rottweiler entre otros, aunque no hay que perder de vista que no todos estos perros son malos ni atacan sin razón: si se los educa bien desde pequeños, no hay por qué temerles.

Por poesía se entiende a las composiciones en verso, aunque el término también puede ser definido como la manifestación de la belleza o el sentimiento estético ya sea a través de los versos o la prosa y dar nombre a cada uno de los géneros en los cuales se dividen las obras literarias.

Estas creaciones artísticas que han enriquecido a la literatura desde tiempos remotos se pueden clasificar de diferentes modos, aunque todas las modalidades poéticas persiguen el mismo fin: crear belleza y conmover al lector con imágenes profundas repletas de sentimientos y lirismo.

Por las características y orígenes de cada texto, es posible reconocer categorías como las de la poesía china, la japonesa y la trovadoresca, aunque las propuestas no se limitan a estas tres alternativas.

Existen, además de las mencionadas, la poesía homoerótica de diferentes procedencias (hispanohebrea, hispanoárabe), la poesía fonética, la poesía infantil, la poesía visual, la poesía épica, la poesía lírica y la poesía dramática, entre otras.

Cabe resaltar que, si bien muchos de estos géneros se cultivan en la actualidad, hoy en día existe también una expresión que parece aglutinar en torno a la “poesía moderna” los textos creados en el presente. Sin embargo, hay que decir que esta denominación refiere a una corriente poética que se encarna en el simbolismo francés y el modernismo hispánico y se extiende hasta las vanguardias históricas. Charles Baudelaire y Walt Whitman, por citar autores de renombre mundial a modo de ejemplo, son algunos de los representantes de la poesía moderna.

El término precio deriva del latín pretĭum y, según la Real Academia Española (RAE), se lo entiende tanto como el valor pecuniario en que se estima algo así como también como el esfuerzo, pérdida o sufrimiento que debe soportarse para conseguir algo.

Si bien no todos los precios suponen el abono de dinero, por lo general se miden con las unidades monetarias que rigen en el país donde se los estipula. Además, de acuerdo a las características que presente el monto fijado y la finalidad que persiga el hecho de ponerle precio a algo, se puede hacer referencia a distintas categorías relacionadas a la formación de precios.

Está, por ejemplo, el precio de afección (el cual supone la elevación del precio ordinario por el afecto o naturaleza especial que pueda tener un objeto que su dueño pone a la venta) y el precio de eficiencia (aquel que corresponde al precio específico con que una sociedad valora a un determinado producto pero teniendo en cuenta los beneficios netos indirectos), aunque las opciones no se limitan a las mencionadas.

Según los expertos en cuestiones comerciales y económicas, hay además precios de lanzamiento (valor bajo en relación al precio de mercado que se le pone a un producto cuando se lo presenta e intenta posicionarlo frente a los consumidores), precio de mercado, precio natural, precio público, precio recomendado de venta al público, precio sombra, precios constantes, precios corrientes y precios de transferencia, por citar otras formas de medir el valor de un bien y/o servicio.

El concepto de pintura abarca desde el arte de pintar hasta la obra ya terminada, es decir, pintada. Claro que también se refiere al color preparado para desarrollar el trabajo, el lienzo donde se ha pintado algo y a la representación viva y animada de personas u objetos por medio de la palabra.

Como sus significados son múltiples y no existe un único tipo de pintura, a continuación mencionaremos las diferentes alternativas que se pueden encontrar al hacer foco en este elemento vinculado al arte.

Se dice, por ejemplo, pintura a dos visos si se forma de modo artificial y refleja dos figuras distintas según cómo se la observe, mientras que si los colores se diluyen en agua se estila definirla como pintura a la aguada.

Otras expresiones asociadas a la oferta en materia de pintura son “a la chamberga” (manera de pintar esculturas, puertas, paredes y otras superficies no expuestas a la intemperie), “al encausto” (colores mezclados con cera y aplicados en caliente), “al fresco” (reservada a paredes y techos, con colores disueltos en agua de cal), “al óleo” (realizada con colores disueltos en aceite secante) y “al pastel” (la que se desarrolla sobre un papel con lápices blandos, pastosos y multicolores), entre muchas otras.

Más allá de las mencionadas, resulta interesante agregar otras alternativas al listado para conocerlas más a fondo: pintura plástica (útil para superficies expuestas a la humedad del ambiente), pintura al cemento (muy resistente al desgaste y la erosión provocados por la lluvia), pintura a la cal (recomendable para exteriores) y pintura decorativa (producto especial que imitan técnicas o aspectos, tal como el mármol, los acabados rústicos, etc).

El concepto de raza hace referencia a la casta o calidad del origen o linaje de un determinado ser, aunque la Real Academia Española (RAE) también da por válidas muchas otras definiciones.

Según la mencionada institución, raza es un vocablo que deriva del latín y puede ser asociado tanto a cada uno de los grupos en los cuales se subdividen las especies biológicas como a una grieta o hendidura. Además, puede ser un rayo de luz que ingresa por una abertura; una zona más clara en el tejido de una tela o paño y la calidad de ciertas cosas en relación a determinadas particularidades que las definen.

Si se habla de razas en relación a los animales, no se tardará en advertir la existencia de categorías que le aportan precisión al mensaje, tal como sucede al citar a las razas autóctonas de un determinado país o región y a las razas en peligro de extinción. Si uno desea profundizar más al respecto, también podrá aclarar si se trata de una raza canina, una raza de gato, una raza bovina, una raza porcina o una raza caprina, por citar algunas a modo de ejemplo.

De asociar la idea a la especie humana (donde, entre otros, se suelen reconocer a la raza blanca, la raza negra y la raza amarilla), surge entonces una gran controversia ya que, hoy en día, se entiende que se le atribuye al término la capacidad de medir la superioridad o inferioridad de ciertos grupos humanos. Por el empleo de esta noción surgió, por ejemplo, el racismo (vocablo que hace referencia a la exacerbación de la naturaleza racial de un grupo étnico) y la idea de discriminación racial, una expresión de raíz negativa.

Al citar el término ‘planta’ uno puede estar haciendo referencia a una gran cantidad de cuestiones, por eso en esta oportunidad mencionaremos cada tipo de planta existente para enriquecer los conocimientos de ustedes y ayudarlos a identificar cada significado que se le atribuye.

En ocasiones, planta se utiliza para describir a la parte inferior del pie, aunque en muchas otras oportunidades se lo emplea como sinónimo de vegetal para hablar de un ser orgánico que vive y crece pero no cambia de lugar por impulso voluntario.

Una planta, en otros contextos, es el diseño en donde se da idea para fabricar o formar algo, así como también es el nombre que recibe cada uno de los pisos o niveles de un edificio.

Cabe resaltar que, más allá de estos significados, planta puede ser también una instalación industrial o una fábrica central de energía y tener relevancia en el lenguaje propio de la geometría, ingeniería y arquitectura.

Una vez que se tiene en claro sobre qué clase de planta se desea dar un mensaje, se puede profundizar al respecto y reconocer en los distintos conjuntos diversas subcategorías. Así, pues, si se habla del reino vegetal se podrá descubrir a las plantas ornamentales, a las de interior, a las plantas carnívoras, a las plantas medicinales, a las leñosas, a las acuáticas y a las plantas parásitas. En cambio, si se busca describir una instalación las alternativas girarán entre planta de proceso, planta piloto, planta regasificadora, planta de energía nuclear, planta de hormigón, planta externa y planta embotelladora, entre muchas otras.

Cuando se habla de ondas mecánicas no se hace referencia a cualquier tipo de onda, sino a aquellas que se caracterizan por crearse a partir de la perturbación de las propiedades mecánicas en un determinado material.

Para que se desarrolle una onda mecánica, como lo es el sonido por ejemplo, es necesario que exista alguna fuente que genere la perturbación, pero también debe haber un medio físico donde se propaguen los movimientos y otro que termine por recibir la perturbación.

Como el concepto de onda mecánica es amplio, quienes estudian estos fenómenos y realizan experimentos para analizarlos en profundidad han establecido distintas categorías para clasificarlos con exactitud en función de sus características.

Así, entonces, es posible encontrar bajo la denominación de onda mecánica a las ondas de tipo elástico, a las ondas sonoras y a las ondas de gravedad.

Al estudiar las particularidades de cada perturbación, se pueden reconocer más detalles sobre las ondas mecánicas y cada subgrupo asociado a ellas. Al respecto, es interesante selañar que cuando se produce una vibración de partículas en un eje paralelo a la dirección de propagación, tal como sucede con las denominadas ondas sonoras, se las llama ondas longitudinales, mientras que aquellas que vibran en un eje perpendicular son ondas transversales. En este último grupo, las ondas mecánicas (como lo son aquellas que se propagan a través de una cuerda tensa) conviven con las ondas electromagnéticas, las cuales se diferencian del resto por no necesitar un material para propagarse: en su caso, tienen la capacidad de extenderse por el espacio libre.

La expresión “paisaje natural” se destina a la presentación de una superficie donde existen elementos que se articulan entre sí pero sin modificaciones por parte del hombre, es decir, que es obra exclusiva de la naturaleza aún en zonas con densidades bajas de población. Para que un espacio no pierda su condición de paisaje natural es necesario que su relieve, sus aguas, su clima, su suelo, su flora y su fauna no estén influidos por el ser humano ni posean rastros de civilización.

Si bien se busca priorizar el medio ambiente en la definición de paisaje natural, se acepta catalogar así a rincones que, en otras épocas, fueron ocupados por sociedades de recolectores, cazadores y pescadores porque se entiende que eran seres que tenían un conocimiento profundo y específico del medio que los rodeaba.

Una vez que se comprende el alcance de este concepto, se está en condiciones de descubrir más detalles sobre él. Así, entonces, es posible advertir que un paisaje natural cubre grandes extensiones de terreno para hallar así todo lo que necesita de la naturaleza para mantenerse en buenas condiciones y que éste puede ser de tipo costero (cuando se localice en proximidades del mar) o de interior (alejado de la costa).

Tras esta diferenciación, se puede efectuar una aproximación aún más intensa basada en el reconocimiento de áreas específicas que atesoran hermosos paisajes naturales: la montaña, el valle y la llanura. Claro que si un lugar rodeado de montañas ha estado sometido a prácticas agrícolas y soportó, por ejemplo, fuego en su suelo, el territorio pasa de ser un paisaje natural a ser un paisaje modificado por el hombre.

Tal como ha informado Tipos.com.mx en otra oportunidad, la sociedad está regida por distintas clases de normas que influyen sobre distintos ámbitos. Como ya hemos descripto las normas ISO, normas morales, normas religiosas y las normas sociales, en esta oportunidad sólo haremos referencia a las normas jurídicas.

Estas últimas, según se desprende de definiciones teóricas, son establecidas por una autoridad para imponer deberes y conferir derechos que permitan ordenar el comportamiento humano en un determinado territorio. Al respecto hay que tener en cuenta que su incumplimiento o transgresión puede dar lugar a algún tipo de sanción.

Cabe resaltar que, ante la existencia de normas jurídicas de diversa índole y finalidad múltiple, se ha procedido con los años a fijar una clasificación que permita diferenciarlas unas de otras por medio de categorías. Así, entonces, se puede decir que existen normas jurídicas de carácter imperativo; otras que se definen como dispositivas; normas secundarias; normas primarias; normas de cambio; normas de orden público y otras de orden privado.

Además de ellas, hay otras que se encuadran en disposiciones dictadas ya sea para una totalidad o para una cierta clase de personas o relaciones jurídicas, tal como ocurre con las normas de derecho común y las normas de derecho especial.

Para ampliar los márgenes, se reconocen también a las normas jurídicas permisivas, las normas explicativas, las normas permanentes, las normas transitorias, las normas reguladoras, las normas perfectas, las imperfectas, las rígidas y las elásticas, aunque la lista es mucho más extensa y busca cubrir los alcances de este tipo de normas en su totalidad.