El concepto de rubio, según se advierte al repasar los significados de esta palabra y sus numerosas aplicaciones prácticas, puede describir la apariencia amarillenta de un cabello, referir a una clase de tabaco de tonalidad cobrizo y amarillo, aludir a especies de peces e identificar a diversos municipios, por ejemplo.

Si hacemos foco en el pelo claro de hombres y mujeres, entonces descubriremos una amplia variedad de rubios. Más allá de cómo luzcan en función de su coloración, es importante diferenciar en primer lugar entre rubios naturales y rubios obtenidos a partir de procedimientos artificiales a base de tintura. Las alternativas a considerar abarcan desde el rubio amarillo (muy dorado) y el rubio platinado (casi blanco) hasta el rubio arena o crema; el rubio oscuro; el rubio rojizo (con mechas más oscuras que dan iluminación colorada); el rubio sucio (en el cual conviven mechas doradas y marrones) y el rubio ceniza (o castaño claro). Hay, además, casos de rubios trigueños (con mucho brillo y pinceladas de castaño), rubios oxigenados (más claros que la versión platinada) y rubios nevados (con más luz y reflejos blancos que el platinado). Por cuestiones estéticas, por otra parte, hay quienes lucen su cabellera rubia pero dejan ver sus raíces oscuras.

Al centrar nuestra atención en los peces, por agregar más información sobre el tema, ganan protagonismo el rubio angelito, el rubio cabrio, el rubio gallardete, el rubio aleticorta, el rubio soldadito, el rubio del Cabo, el rubio vaquita y el rubio menor, por detallar algunas denominaciones comunes.