Dentro de la enorme variedad de vehículos que a diario circulan por calles, avenidas y rutas (carreteras) aparecen los camiones.

Se trata de unidades con ruedas grandes que sirven para el transporte de carga. En ellos, de acuerdo a las características que posean, se pueden trasladar desde seres vivos hasta alimentos que requieren refrigeración y otros productos.

En suelo venezolano y otros territorios, por ejemplo, se conoce como camión cava a aquel que está dotado con una cámara frigorífica para garantizar la buena conservación de los alimentos. Los cubanos, por su parte, definen como camión de volteo a los volquetes (poseen un sistema para poder volcar la carga que trasladan), mientras que los argentinos aluden a la expresión “camión hidrante” para identificar al imponente vehículo que se utiliza para dispersar con agua a la gente en caso de manifestaciones o tumultos.

Asimismo, es posible distinguir entre camiones de caja abierta y camiones de caja cerrada; reconocer a los camiones cisterna (acondicionado para transportar sustancias molidas o gases líquidos) y clasificarlos en función del uso que se les da. Al respecto, se pueden señalar como ejemplos a los camiones botelleros (tienen botellas como carga), a los camiones blindados (transportan objetos de valor o importantes sumas de dinero), a los camiones compactadores de basura (para destruir desechos), camiones de bomberos (trasladan al personal capacitado con las herramientas necesarias para combatir incendios, etc), a los camiones mosquito (con una plataforma adecuada para transportar automóviles) y a los camiones hormigoneros (con mezcladora), por agregar algunos a modo orientativo.