Desde hace muchos años, la Coca Cola se impone en el mundo como una de las marcas favoritas de los fanáticos de las bebidas cola. Esta gaseosa, comercializada a nivel internacional en supermercados, restaurantes, kioscos y máquinas expendedoras por la firma The Coca-Cola Company, muchas veces es criticada por los supuestos componentes nocivos para la salud y los efectos de su consumo prolongado pero, aún así, no deja de sumar adeptos.
Si bien por esta época está de moda la versión personalizada de los envases de Coca Cola (numerosos consumidores eligen la botella o lata que lleva impreso su nombre o apellido) gracias a una efectiva campaña de marketing, no hay que perder de vista todas las opciones que propone este refresco gasificado sin alcohol.
A la hora de disfrutar este líquido de fórmula secreta algunos optan por las latas de distintos tamaños, mientras que otros prefieren la presentación en botella, que también tiene diferentes capacidades y puede ser de vidrio o plástico.
Asimismo, es interesante recordar el abanico de sabores que ofrece la marca. Junto a la tradicional Coca Cola, aparecen alternativas con ingredientes, sabores y niveles de valores energéticos, carbohidratos y sodio específicos. En este marco, los consumidores tienen a disposición las dietéticas Coca Cola Light y Coca Cola Life, además de la Coca Cola Zero (una versión que se destaca, según sus impulsores, por tener cero azúcar o cero calorías).
Una curiosidad vinculada a esta popular gaseosa que provoca un verdadero placer al consumirse bien fría: existe una copa dulce ofrecida como postre que, entre otros ingredientes, incluye una masa saborizada con almíbar de la clásica Coca Cola.