Las aplicaciones prácticas del concepto de vivero son muchas, pero la interpretación más popular guarda relación con la jardinería ya que así se conoce al sitio donde son plantadas, crecen y se comercializan toda clase de plantas.

En este sentido, es posible marcar diferencias entre los viveros que trabajan en torno a especies agrícolas y los viveros que priorizan a las especies forestales. Asimismo, hay que resaltar que los viveros suelen ofrecer plantas con fines ornamentales pero también satisfacen las expectativas de clientes que buscan especies comestibles. Tampoco se puede dejar de mencionar a los viveros de investigación, a los viveros hidropónicos, viveros orgánicos ni a los viveros especializados en bonsai, por resaltar otras alternativas que demuestran la diversidad existente en este segmento.

Por otra parte, se pueden reconocer usos del término vinculados a regiones o divisiones administrativas, tal como sucede con el Vivero de Omaña (Castilla y León, España) y la región cubana conocida, simplemente, como Vivero. En la provincia española de Lugo, además, se ubica la Ría de Vivero, así como en territorio mexicano se encuentran los Viveros de Coyoacán.

Los expertos en Astronomía, en cambio, reconocen como Vivero a un cráter localizado en Marte, mientras que a nivel arquitectónico es posible asociar esta noción con el Palacio de los Vivero y el Estadio Nuevo Vivero, ambos de España.

Por último, es interesante señalar que la palabra Vivero funciona además como apellido: a lo largo de la Historia han adquirido notoriedad en distintos ámbitos (como la Política, las Artes, el Deporte…) personas de múltiples nacionalidades.