El concepto de rol puede interpretarse de diversas maneras ya que se trata de una palabra que posee dos orígenes: uno inglés que a su vez deriva de un vocablo francés (rôle) y otro catalán que, a su vez, se origina en la expresión latina rotŭlus. La primera de las acepciones mencionadas posiciona a la noción como sinónimo de papel o función (de ahí que se hable, por ejemplo, de los juegos de rol), mientras que la otra refiere a un listado o enumeración; sirve como sinónimo de rollo o arrollado y, en el ámbito de la Marina, identifica a una licencia que se le otorga al capitán de una embarcación.
De profundizar más al respecto y analizar las aplicaciones prácticas del vocablo, podremos identificar un gran número de categorías para el concepto de rol. En este contexto se podrá aludir a los “cambios de roles” o a la “interpretación de roles” (propio del ámbito artístico, donde los actores se ponen en la piel de diferentes personajes), así como al rol social de alguien. En el plano deportivo, por otra parte, quienes hacen gimnasia acostumbran hablar de rol para señalar un ejercicio que también se conoce como “vuelta carnero” o “vuelta de carnero”.
Además de los mencionados, al estudiar una determinada situación es posible identificar según cada caso roles femeninos y masculinos; roles familiares; roles gerenciales; roles docentes; roles del Estado; roles de trabajo; roles de liderazgo y roles estratégicos, entre muchos otros que le aportan diversidad a la noción.