El acto de integrar algo o de integrarse a un grupo o lugar se define como integración.
En la práctica, según el contexto en el cual se aproveche la noción y las particularidades que posea esta acción o proceso, es posible distinguir entre numerosas clases de integración.
Cuando en una comunidad se busca incorporar a todos los sectores a un mismo sistema de bienestar, por ejemplo, se hace alusión a la integración social, mientras que la aceptación de las diferencias raciales y la tolerancia a todas las tradiciones para favorecer los intercambios culturales y la igualdad de oportunidades sin discriminar por origen o color de piel se define como integración racial.
Distinto es el caso de la llamada integración económica, ya que en este marco hay países que fusionan sus economías, es decir, implementan medidas para erradicar de modo progresivo las fronteras financieras para tener beneficios mutuos.
De buscar más modalidades de integración para descubrir el amplio alcance de esta noción, ganarán relevancia también la integración matemática (área donde se trabaja con integrales), la Integración Estudiantil (tal como se identifica a un movimiento peruano de estudiantes pertenecientes a la izquierda revolucionaria), la integración monetaria (llevada adelante por al menos dos naciones que acuerdan compartir una misma moneda), la integración política (diversos partidos o sistemas se unifican para conseguir la inclusión absoluta en beneficio de todos) y la integración parcelaria (propia del campo de la Ingeniería Civil Agronómica, donde se agrupan parcelas de un propietaria en la cantidad más baja de ellas que sea posible), por señalar otras alternativas a modo de referencia.