En esta oportunidad vamos a hacer foco en un objeto que, con distintas características, adquiere notoriedad en múltiples contextos. Como el título de este artículo lo adelanta, hoy ofreceremos detalles sobre copas.
Las copas pueden sobresalir en un brindis (donde se disfruta un vino o un champagne) o al ganar un torneo o competencia deportiva. Asimismo, los expertos en Botánica aprovechan el término para identificar a la parte superior de un árbol (“Las aves hicieron nido en la copa del árbol”), mientras que aquellos que juegan a las cartas saben que, dentro de la baraja española, hay un palo que se conoce como copa. Hay, además, un accesorio para lucir con elegancia sobre la cabeza que se identifica con el nombre de sombrero de copa.
Si nos centramos en las copas para beber, encontraremos distintos tipos de acuerdo a la bebida a la que están destinadas. Para los vinos espumosos se suelen tener en cuenta las copas de flauta (altas y angostas), que minimizan la pérdida de gas. Las copas de champagne también apuntan a conservar las burbujas. En los restaurantes, por otra parte, es habitual encontrar diferentes tipos de copas en la mesa: una para vino, otra para el agua, etc.
En el plano de los deportes, copa es el nombre de distintas clases de campeonatos y el trofeo que se entrega al ganador. Así podemos encontrar varios tipos de copa, como la Copa del Mundo (un torneo de alcance mundial) y la Copa América (que enfrenta a seleccionados del continente americano), entre otros.
En ciertas culturas, por otra parte, es usual que se armen copas de cráneos en base a la utilización como recipiente del cráneo de un rival o enemigo.