Los monarcas o príncipes soberanos de un reino reciben la denominación de reyes, palabra que también identifica a una pieza de ajedrez. En los juegos de naipes, asimismo, se conoce como reyes a ciertas cartas (independientemente del palo al que correspondan) de la baraja española que llevan impresa la figura de un rey.

De buscar más usos de este término, es posible advertir que se designa como rey a aquel elemento u organismo que, por alguna razón, sobresale frente al resto de los de su clase, tal como sucede con el león, a quien se considera el ‘rey’ de la selva. El exitoso cantante latinoamericano Luis Miguel, asimismo, suele ser apodado como “El Rey”.

A partir de la teoría y de investigar las múltiples aplicaciones prácticas que esta noción ha tenido a lo largo de la Historia, se pueden distinguir expresiones como “rey de armas”, “rey de banda”, “rey de codornices”, “rey de gallos”, “rey de los trigos”, “rey de romanos”, “rey de zopilotes”, “Reyes Magos” (según la tradición católica, fueron tres y se conocieron con el nombre de Melchor, Gaspar y Baltazar), “Reyes Católicos” (Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón) y “mariposa rey” (también conocida como mariposa monarca).

Cabe mencionar, por otra parte, que hay localidades y regiones en distintos rincones del mundo que aprovechan esta palabra (como sucede con el grupo de cayos que bordea Cuba y que se ha bautizado como Jardines del Rey; el municipio español Pozuelo del Rey y la localidad bonaerense de Paso del Rey, en Argentina), al igual que ocurre al darle nombre a libros o películas; al respecto, no se puede dejar de recordar que, en español, el largometraje animado Surf’s Up se tituló ‘Reyes de las olas’.