Así como hay peces que habitan en entornos naturales de distintos rincones del mundo, hay ejemplares de esta especie que nacen, viven, se reproducen en una pecera, un espacio artificial creado por el hombre para criar a esta clase de animales.
Los acuarios, tal como se conoce a los recintos acuáticos que se ambientan para la subsistencia de los peces seleccionados para la crianza, pueden recrear hábitats marinos o de agua dulce, en función de los peces que vayan a vivir en ellos ya que, tal como informamos tiempo atrás en Tipos.com.mx, no todos los peces presentan las mismas particularidades y necesidades.
Hay organismos como el tiburón gato, los peces globo y el crómido anaranjado, por ejemplo, que viven en acuarios de agua salobre (producto de mezclar el agua del mar con la de río, y puede encontrarse por lo general en los estuarios); otros que viven en agua de mar y un grupo que sólo sobrevive en aguas dulces (como ocurre con especies como el botia tigre, el corydoras hastatus, el labeo bicolor, el pez del paraíso y el hypostomus plecostomus, por citar algunas a modo de referencia). Asimismo, es necesario tener en cuenta que no todos los peces son aptos para convivir con ejemplares de otras especies y formar con ellos un acuario comunitario.
Cabe resaltar, por último, que en los acuarios también se pueden tener peces tropicales, aunque para garantizar el bienestar de esta variedad que puede incluir, entre otras alternativas, a carácidos, ciprínidos, laberíntidos y peces arcoiris, es necesario contar con conocimientos avanzados sobre el cuidado de esta variedad de seres.