A lo largo de nuestra vida, los seres humanos tomamos distintas clases de medidas a fin de realizar una determinada actividad, conseguir una cierta información o cambiar el rumbo de nuestro destino. Pueden ser, según las circunstancias, medidas a corto, mediano o largo plazo, así como también podemos vernos obligados a tomar medidas urgentes o de último momento por circunstancias de fuerza mayor.
En el hogar, por señalar situaciones comunes a cualquier familia, podemos tomar las medidas de una habitación para saber si vamos a poder acomodar en ella los artefactos que tenemos o que deseamos adquirir así como tenemos la posibilidad de encargar muebles a medida, podemos medir a nuestro hijo para saber su altura o tomarle las medidas de busto, cintura y cadera a nuestra hija adolescente para hacerle un vestido acorde a sus características corporales, por ejemplo.
En el campo del Derecho, en tanto, suelen adoptarse medidas cautelares a fin de asegurar que, en el marco de un litigio, un derecho pueda efectivizarse si se lo prueba y legitima. Asimismo, existen las medidas precautorias y las medidas preliminares.
Los expertos en cuestiones matemáticas y estadísticas, por su parte, toman en cuenta las medidas de tendencia central, las medidas de dispersión, las medidas espectrales, el espacio de medida, la medida de Mahler y la medida de Haar, entre otras.
En un gobierno, por describir otras realidades, se deben tomar todas las medidas necesarias para garantizar y promover el bienestar de la población. En este marco, entran en juego las medidas económicas, las medidas de seguridad, las medidas sanitarias, las medidas educativas, etc.