Tipos de tornillos


El tornillo, además de ser una diminuta pieza que permite sujetar materiales y se enrosca en diversas superficies, da nombre a muchas otras cuestiones que, a fin de ampliar sus conocimientos, detallaremos a continuación.

En ciertos países de América Central, por ejemplo, se conoce como tornillo a un arbusto (también conocido con el nombre de mezquite dulce) de flores rojizas que da un fruto con apariencia de hélice y que se suele emplear con fines medicinales, mientras que en otras zonas este concepto se destina a describir a las sensaciones intensas de frío. Asimismo, es frecuente que la pasta comestible de origen italiano que ha sido bautizada como fusilli sea citada por los niños y ciertos adultos como los “fideos de tornillo”.

En otras épocas, además, se acostumbraba hablar de tornillo cuando se quería hacer referencia a la deserción de algún soldado.

A raíz de los múltiples significados de este vocablo, es posible distinguir numerosas clases de tornillos. Al respecto, se pueden citar al tornillo de Arquímedes (sistema que se emplea para la elevación de los fluidos), al tornillo de banco (utilizado en trabajos de cerrajería, carpintería y otras tareas artesanales), al tornillo sin fin (expresión propia de la ingeniería mecánica para hacer referencia a un elemento que permite poner en funcionamiento un sistema de engranajes), al tornillo de Palmer (un instrumento de medición) y al tornillo de Edison (el cual hace posible la fijación y ajuste de las lámparas incandescentes), aunque es importante tener en cuenta que las opciones en materia de tornillos no se limitan a las mencionadas en este artículo.