Tipos de sidra


A la hora de realizar un brindis, una de las bebidas alcohólicas que se suele tener en cuenta es la sidra. Este líquido, que por lo general presenta una tonalidad ambarina, es resultado de la fermentación del zumo logrado en base a manzanas que han sido exprimidas.

La sidra vasca es una opción que enriquece a este universo. Hay en el País Vasco diversos museos especializados en la historia de las sidrerías y en las características de elaboración de este producto que carece de gas carbónico.

Si hacemos foco en las bondades de la sidra de Asturias, por indicar otra posibilidad, podremos aprender a distinguir entre la sidra natural tradicional (la cual no se encuentra filtrada ni requiere escanciado), la sidra natural filtrada (que no exige escanciado y está estabilizada) y la sidra natural espumosa (una variedad que presenta un gas endógeno procedente del proceso de fermentación, la cual puede llevarse a cabo en depósito en base al método granvas o bien en botella por el método tradicional).

En suelo chileno, en tanto, ha nacido la sidra de Punucapa, una bebida de baja graduación alcohólica que se fabrica de modo artesanal con variedades de manzanas típicas de la región que le da nombre a este líquido que suele tomarse, por tradición, durante las Fiestas Patrias.

Las sidras secas, las sidras dulces, las sidras ecológicas, las sidras saborizadas (hay de fresa, pera, ananá, etc) y las sidras sin alcohol aptas para ser consumidas por menores de edad son otras opciones que diversifican al fascinante universo de la sidra.