Una de las frutas más consumidas a nivel mundial es la manzana, un comestible del cual hay múltiples variedades y que se puede disfrutar a cualquier edad de numerosas maneras. Como sabrán muchos de ustedes, con ellas se puede hacer jugo, vinagre o sidra, así como también puré, ensaladas y compotas, por señalar sus usos más comunes. Hay, asimismo, manzanas asadas, manzanas caramelizadas, manzanas rellenas, manzanas deshidratadas, etc.
A nivel general, suelen distinguirse las manzanas rojas frente a las manzanas verdes, pero la oferta no se limita a estas dos presentaciones. Hay quienes prefieren, por ejemplo, a la manzana reineta por su sabor y su aroma, o apuestan por la manzana asperiega cuando quieren hacer sidra.
Lejos de estas interpretaciones vinculadas al mundo de la alimentación, existen otras expresiones que amplían el alcance de esta palabra y diversifican su significado. Para hacer referencia a la nuez de la garganta, por ejemplo, es común que mucha gente aluda a la “manzana de Adán”, mientras que todo aquello que provoca discrepancias y discusiones está considerado como “manzana de la discordia”. En cuentos de hadas o leyendas, en tanto, es frecuente que aparezca en escena una manzana dorada de propiedades mágicas.
Por último, conviene tener presente que, como también se describe como manzanas a las cuadras de un entorno urbano que están delimitadas por distintas calles, es posible además encontrar categorías como el caso de la argentina Manzana de las Luces, tal la denominación de una manzana histórica ubicada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.