Para poder seleccionar el método más efectivo para alcanzar el fin deseado, en todos los casos es fundamental la información. Por esa razón, hoy describiremos diferentes propuestas de depilación a fin de orientar e informar a todas las personas que, por alguna razón, deseen o necesiten depilar alguna parte de su cuerpo.

Cabe recordar que la depilación surge a partir del acto de depilar, es decir, de remover y arrancar vello o pelo para mantener a la piel libre de ellos. A diferencia de lo que mucha gente puede llegar a creer, esta práctica no es exclusiva del universo femenino ni de una cierta edad: los hombres también apelan a esta acción para quitarse el vello no deseado.

Mientras que algunas personas apelan a métodos de depilación temporales, otras prefieren invertir más dinero y someterse a tratamientos de depilación definitiva, aunque hay quienes alertan sobre los riesgos de esta clase de procedimientos.

Si nos centramos en las alternativas de depilación casera, la solución más rápida es la de usar afeitadora o máquinas descartables de depilar, aunque exige una frecuencia mayor respecto a otras opciones porque no quita el vello desde la raíz. La depilación con cera (puede ser fría o caliente) es otra posibilidad para tener en cuenta en el hogar, al igual que la decoloración del vello (aunque no depila, disimula el pelo a través de productos químicos) y las cremas depilatorias.

Más complejas (y que requieren consultas y muchas precauciones a la hora de elegirlas para evitar problemas en la piel) son las técnicas de depilación definitiva por electrólisis y la depilación láser, por señalar dos de las más utilizadas.