A diferencias de otras clases de composiciones, los textos periodísticos se caracterizan por ofrecer información y reflejar la realidad a partir de distintos recursos, géneros y elementos.
Como el nombre de la categoría lo deja suponer, estas obras surgen del trabajo del periodista. Los textos periodísticos son parte fundamental de los servicios ofrecidos tanto en la prensa escrita como en la oral.
Con sólo analizar el contenido de un periódico, uno puede tomar conciencia, sin ser un experto en el tema, de la existencia de múltiples clases de textos periodísticos, que varían entre sí en extensión, formato, estructura, contenido, formas de abordaje…
Entre las modalidades de texto periodístico más fáciles de reconocer por el lector común están las alternativas de la noticia (que puede surgir en cualquier ámbito por numerosas razones y catalogarse entonces como noticia deportiva, política, económica, policial, cultural, etc) y de la entrevista (los entrevistados varían y las preguntas y el foco de la nota se orientan especialmente en cada caso para llamar la atención de los lectores/televidentes/oyentes).
Claro que, además de ellas, aparecen para enriquecer al conjunto de los textos periodísticos las crónicas, las notas de opinión y los reportajes. Se tratan de géneros que pueden desarrollarse a diario con disparadores varios, ya sea por hechos del plano nacional como así también por realidades internacionales. Como rasgo distintivo de los textos periodísticos más allá de cómo se planteen y se lleven a cabo, es interesante marcar su sentido unidireccional ya que el comunicador publica una nota que llegará a una cantidad variable de lectores pero no pretende una respuesta a modo de devolución (más allá de que exista la posibilidad de dejar comentarios en los diarios digitales o de enviar correos electrónicos/cartas al medio que publica dicho material).