En Tipos.com.mx ya hicimos una referencia general a los tejidos. Asimismo, ofrecimos información acerca de los tejidos musculares y detallamos las diversas clases de tejido epitelial. Ahora, a fin de complementar los datos anteriores, llega el momento de hacer foco en las características de los tejidos óseos.

Esta variedad de tejido conectivo, indican los expertos, es la parte fundamental de la composición de los huesos, los cuales están protegidos por el periostio, tal el nombre de una membrana que posee nervios y vasos sanguíneos. En las estructuras maduras se pueden observar laminillas óseas de espesor variable que pueden ser concéntricas o especiales. A nivel macroscópico es posible reconocer dentro de este conjunto a varios tipos de tejido óseo, los cuales describiremos a continuación.

Uno de ellos se conoce como tejido areolar o esponjoso y está presente en huesos planos y cortos así como también integra la epífisis de las estructuras óseas largas. Sirve, de acuerdo a los especialistas, como reservorio de médula roja, que se encarga de producir células sanguíneas.

El tejido denso (también definido como compacto), por su parte, se localiza en la parte exterior de los huesos largos, en los huesos planos y en diferentes espacios de las estructuras óseas cortas. Se trata de un tejido que se caracteriza por ser duro pero, al mismo tiempo, presenta fragilidad.

Un análisis más profundo permite hacer referencia a una tercera clasificación, el tejido subcondral. Este componente liso se puede encontrar en los extremos de las estructuras óseas, recubierto por cartílagos.