Con origen en el término latino rhythmus, el concepto de ritmo hace referencia a una característica de las composiciones musicales que se define como la proporción entre el tiempo de un movimiento y el acorde siguiente. Asimismo, el vocablo se puede definir como la serie de voces, silencios y cortes que se hace presente en los lenguajes prosaicos y poéticos y, en líneas generales, como el orden sucesivo de una determinada cosa.
A nivel musical, se pueden reconocer ritmos latinos (como la milonga, el malambo, el candombe y la chacarera, por citar algunos), ritmos armónicos, ritmos dumbek (desarrollados con tambores de mano), ritmos folclóricos, ritmos caribeños, ritmos libres y ritmos lombardos (tal como se define a los ritmos relacionados a la música barroca), entre muchos otros que diversifican el segmento. De evaluarlo desde un contexto literario, en cambio, se hablará del ritmo métrico.
Los expertos en Biología y los especialistas en Medicina, por su parte, suelen hacer mención al ritmo biológico, así como también al ritmo cardíaco, al ritmo nictemeral, al ritmo sinusal y al ritmo ultradiano.
Otras expresiones, nombres o cuestiones que amplían el alcance de esta palabra: “Ritmo Social” (tal el nombre de una revista editada en República Dominicana), “Ritmo Peligroso” (banda musical formada en territorio mexicano a fines de la década del ’70), “Ritmo total” (single que Enrique Iglesias popularizó en inglés bajo el título de “Rhythm Divine”), Fiat Ritmo (un antiguo modelo de coche también conocido como Fiat Strada que, en la década del ’80, fue sustituido por el Fiat Tipo).