La palabra es aquel segmento del discurso que, por lo general, se inicia y se termina con una pausa y posee un determinado acento y significado. El término también se entiende como la facultad de hablar, la aptitud oratoria de alguien, el empeño que uno hace de su fe y pone como garantía de lo que anuncia y se reconoce como la representación gráfica de aquello que se dice de modo oral.

Como se trata de un concepto muy amplio que puede dar espacio a numerosas expresiones, para dominar bien sus significados y apreciar sus variantes en profundidad conviene saber tanto la teoría como la aplicación concreta de las respectivas definiciones.

Así, entonces, se podrán reconocer sin problemas los distintos tipos de palabras que existen al menos en idioma español y saber que toda palabra puede ser clasificada en función de criterios morfosintácticos, fonológicos o funcionales.

Hay, por ejemplo, palabras agudas (acentuadas en la última sílaba), palabras graves (con acento en la penúltima sílaba) y palabras esdrújulas (aquellas que se acentúan en la antepenúltima sílaba), así como también palabras monosílabas, bisílabas, trisílabas y tetrasílabas.

De valorarse la categoría léxica, las palabras podrán ser definidas según sus características y utilidades como adjetivos (usados para describir objetos y/o seres), sustantivos (palabras que refieren a elementos, ya sean abstractos o concretos) o verbos (las cuales denotan acción). En cambio, si se profundiza en las categorías funcionales habrá palabras que cumplirán el rol de determinantes, otras que serán conjunciones y hasta se podrán reconocer adverbios, preposiciones e interjecciones.