Quienes experimentan un gran interés por la danza tienen numerosas variantes a disposición para disfrutar o desarrollar. Entre ellas aparecen las danzas árabes, un estilo que además de proponer movimientos corporales específicos con mucha sensualidad invita a descubrir una cultura.
Como parte de las danzas árabes se puede mencionar a la danza del vientre, una opción nacida en Egipto que surgió con la idea de honrar a la Tierra y a la fertilidad del ser humano. Con el tiempo, comenzó a bailarse para los sultanes y se consolidó gracias a bailarinas profesionales, quienes la llevaban a cabo en cafés o mansiones de gente adinerada.
También es una posibilidad a tener en cuenta el flamenco árabe, donde se fusionan elementos orientales y occidentales para dar espacio a un estilo que combina la percusión árabe con técnicas y movimientos propios del flamenco.
Asimismo, se puede distinguir la disciplina de la danza con serpientes, que en la mayoría de los casos gira en torno a una figura de metal aunque hay artistas que se animan a bailar con una serpiente real para proporcionarle al espectáculo una mayor complejidad.
Cabe resaltar que al buscar más referencias sobre danzas árabes ganan relevancia además la danza del bastón, elementos que para los hombres son largos y cuando se trata de mujeres su extensión es más corta, y la danza con espada (coreografías desarrolladas tanto para hombres como para mujeres en las cuales se necesita una gran concentración para asombrar con el dominio del cuerpo y de la espada), por mencionar otras dos a modo de referencia.