El dicho popular asegura que “Todo depende del cristal con que se mire”. Ahora bien… ¿qué es un cristal y cómo pueden ser sus variedades? En esta nota, todos los detalles y datos útiles para aprender más sobre el tema de modo didáctico y sin inconvenientes.
Un cristal puede ser considerado un vidrio de buena calidad, o bien un sólido que se caracteriza por tener sus moléculas y átomos repartidos de manera regular en el espacio. También se aprovecha esta noción para identificar a las lentes de las gafas y, en el campo de la Geología, para individualizar a los cuerpos sólidos que, por naturaleza, poseen formato poliédrico y dimensiones más o menos regulares.
Cuando se hace alusión a un cristal hilado, por señalar una posibilidad, se busca describir al vidrio que ha sido estirado y fundido con apariencia de hilo. La idea de cristal de roca, en cambio, refiere a los cuarzos incoloros, transparentes y cristalizados.
El cristal tártaro, por su parte, es el tártaro que ha sido cristalizado y purificado, mientras que el cristal líquido es aquel que se emplea en las pantallas de determinados equipos eléctricos y que posee la capacidad de modificarse por estímulo de un campo eléctrico. De buscar información sobre los cristales anisótropos, podremos saber que se trata de minerales con más de un índice de refracción luminosa teniendo en cuenta la orientación de vibración de las ondas de luz.
Es importante también tener presente que existen cristales sólidos y cristales luminosos, así como cristales covalentes, cristales iónicos, cristales metálicos y cristales moleculares, cada uno con particularidades que los vuelven únicos en su clase.