Las hormonas son sustancias que surgen desde ciertas glándulas y, al avanzar por el sistema circulatorio, pueden estimular, inhibir o regular la actividad de diversos órganos.

Para identificar a una hormona en particular y apreciarla en profundidad pueden evaluarse distintas variables. Si se analiza su naturaleza química, por ejemplo, se pueden descubrir las categorías de hormonas peptídicas (aquellas formadas por cadenas de aminoácidos que no pueden atravesar la membrana plasmática de la célula diana) y hormonas lipídicas (las cuales pueden ser de tipo esteroide o eicosanoide y poseen la capacidad de atravesar sin inconvenientes la bicapa lipídica de las membranas celulares).

Si se extiende el análisis de las hormonas, es posible también hallar los conjuntos de las hormonas aminoacídicas y las hormonas adenohipofisarias, además de lograr una diferenciación concreta entre las hormonas naturales y las hormonas sintéticas, y de acumular información detallada sobre las llamadas hormona antimulleriana (glicoproteína dimérica producida por las células de Sertoli que inhibe el desarrollo de los conductos de Müller en el embrión masculino), hormona antidiurética (distribuida a partir de modificaciones en la osmolaridad sérica o en el volumen de la sangre) y hormona liberadora de gonadotrofina (decapéptido liberado por el hipotálamo que estimula la liberación de gonadotropina por parte de la adenohipófisis).

Asimismo, cabe destacar que, en el campo de las hormonas, existe un grupo de sustancias propias de los vegetales que reciben el nombre de fitohormonas. Estas hormonas químicas son producidas por algunas células en las plantas con el fin de regular sus procesos fisiológicos.