Tipos de graffiti


La Real Academia Española asocia al término derivado del italiano graffiti al concepto de grafito, un vocablo que fue creado para hacer mención no sólo a los letreros o dibujos que se realizan por lo general con aerosol sobre paredes o superficies duras sino también a los escritos o ilustraciones elaboradas a mano desde la época del Imperio Romano.

Esta clase de pintadas que uno puede apreciar a diario en diversos rincones urbanos surgen por motivos políticos, comerciales o sociales y, si bien cada una presenta sus propias características, pueden agruparse con otras bajo distintas denominaciones.

Existe por ejemplo el llamado Art Graffiti, un estilo nacido en el plano del hip-hop de las décadas 70 y 80 que se distingue por exhibir el nombre del artista de modo monocromático, con dos colores o valiéndose de una técnica más elaborada que, como mínimo, emplea tres tonalidades.

También se reconoce al Graffiti Público o Slogan (el cual nace por el deseo de alguien de expresar sus puntos de vista respecto a cuestiones de alcance social tales como lo son la ecología, la política y los vínculos internacionales) y al Latrinalia o Graffiti Privado, un tipo de graffiti que aparece en las paredes, puertas o azulejos de los baños públicos. Éstos pueden abarcar desde dibujos y palabras sueltas hasta reflexiones personales y citas literarias.

Más curioso es el origen del llamado “graffiti autóctono madrileño”, una clase de pintadas de España que recibió ese nombre por surgir casi de forma espontánea a principios de los 80 gracias a un grupo de escritores de la zona que decidió empezar a dejar su nombre grabado en múltiples espacios públicos.

Cabe destacar que, más allá de los distintos tipos de graffiti que se reconocen hoy en día, a lo largo de los años la técnica fue mutando y enriqueciéndose hasta conseguir, por ejemplo, que surgieran graffitis en las cortezas de los árboles y decoraciones urbanas creadas a partir del stencil.