Una de las plantas más bellas y aromáticas que se puede cultivar en hogares que cuentan con un poco de espacio verde y suelos luminosos y bien drenados es el jazmín. También se las puede aprovechar en ramos cortados en ambientes interiores para perfumar diversos rincones. Los expertos en aromaterapia, en tanto, aprovechan distintas variedades de jazmín con fines relajantes y afrodisíacos, mientras que los fanáticos de las infusiones muchas veces eligen consumir té de jazmín, elaborado con flores de esta planta. En relación a la flor del jazmín es interesante señalar asimismo que ha inspirado el nombre de un tipo de arroz muy empleado en la cocina tailandesa, bautizado como arroz jazmín o arroz tailandés.

De tener la posibilidad, además del jazmín común, se puede incluir en el jardín al jazmín de España o jazmín real, una especie común en Murcia, Valencia y Cataluña con flores blancas en la parte interna y con algo de color por fuera.

El jazmín amarillo que también procede de territorio español, el jazmín de la India (uno de los nombres que identifica a la gardenia), el jazmín paraguayo o del Paraguay que cautiva con su exquisita combinación floral blanca y lila, el jazmín amarillo endémico de suelo chino, el jazmín del país (especie considerada como la planta nacional de Pakistán), el jazmín del Uruguay propio de Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil aprovechado con fines ornamentales y el jazmín asiático nativo de Japón y Corea son otras alternativas que permiten descubrir la diversidad existente en materia de jazmines.