Para entender qué es el epitelio y cuáles son las particularidades que permiten segmentar a estos tejidos en diversas categorías es necesario dejarse cautivar por el mundo de la Anatomía.
La teoría general señala que el epitelio es el tejido que cubre el organismo de los animales, una capa compuesta por células. Al profundizar en esta temática encontramos una amplia variedad de epitelios, cada uno con particularidades y funciones propias.
El epitelio glandular (también conocido como epitelio secretorio), por señalar un caso puntual, conforma la parte secretora de las glándulas, mientras que el epitelio de revestimiento compone la capa externa de las mucosas y la epidermis.
Además de ellos aparece como alternativa a tener en cuenta el epitelio pigmentario integrado por células que poseen melanina y el epitelio sensorial, el cual se localiza en los órganos involucrados con los sentidos. El epitelio intestinal, en tanto, incluye células con una función sensorial determinada y el epitelio respiratorio está reservado para las vías aéreas.
De tomar en cuenta el formato de las células que conforman a cada epitelio, podremos distinguir entre epitelios cilíndricos o prismáticos, epitelios cúbicos y epitelios escamosos o planos. Cuando entra en juego la cantidad de capas celulares involucradas, en cambio, adquieren relevancia las categorías de epitelios pseudoestratificados, epitelios estratificados y epitelios simples. En este último caso, el grupo se subdivide a la vez en epitelios cilíndricos monoestratificados, epitelios cúbicos monoestratificados y en epitelios planos monoestratificados.
Las estructuras de cada tejido, asimismo, dan origen a los epitelios flagelados, a los epitelios con microvellosidades y a los epitelios ciliados.