En muchos contextos, asuntos y disciplinas adquiere relevancia la idea de dimensión. No solo existen las famosas tres dimensiones (3D) que tanto nos sorprenden a través de películas, videojuegos y ecografías que muestran imágenes con gran exactitud y profundidad: en los párrafos siguientes nos encargaremos de detallar otras clases de dimensiones, algunas más conocidas que otras.
A grandes rasgos, podemos reconocer a las dimensiones físicas (que se segmentan en dos pares de dimensiones perceptibles, conformadas por tres dimensiones vinculadas al espacio y una cuarta dimensión de carácter temporal) y a las dimensiones matemáticas. En este último caso se trabaja con la dimensión topológica y/o la dimensión de un espacio vectorial. Los expertos en Geometría, asimismo, tienen en cuenta la dimensión fractal y, en este marco, entran en juego la dimensión de información, la dimensión de empaquetado, la dimensión de Hausdorff-Besicovitch, las dimensiones de Rényi, la dimensión de correlación y la dimensión de homotecia.
En el ámbito de la ficción, por otra parte, es común que se haga alusión a una dimensión cuando se busca hacer foco en un universo paralelo.
Más allá de las categorías presentadas líneas arriba, es posible distinguir a la dimensión de escala anómala, a la cuarta dimensión (aplicable en ciencia ficción, Física y Matemática), a la dimensión VC (asociada a los algoritmos de clasificación estadística), a las dimensiones culturales, a las dimensiones de tiempo múltiples y a la dimensión sobrenatural (concepto contemplado dentro de la Teología Cristiana), entre muchas otras que extienden las definiciones y usos de la noción.