Los expertos en cuestiones eléctricas definen como potenciómetro al instrumento que permite medir los potenciales eléctricos, así como también aprovechan el concepto para nombrar a la resistencia que, en un circuito, puede ser regulada.

Cabe resaltar que estos aparatos se comercializan en una amplia variedad de modelos que se diferencian entre sí por sus posibilidades de aplicación, la resistencia que ofrecen y la tecnología que emplean.

En base a esas características, entonces, es posible hablar de distintas clases de potenciómetros. Existen, por ejemplo, unos potenciómetros que se definen como ‘de mando’ (permiten controlar de manera manual dispositivos electrónicos como se suele hacer, por ejemplo, al girar una perilla con el fin de subir o bajar el volumen de un equipo de audio) y otros que se presentan como potenciómetros de ajuste.

Junto a ellos pueden aparecer como otras opciones a considerar los potenciómetros deslizantes (muy empleados en ecualizadores gráficos), los potenciadores multivuelta (brindan la posibilidad de realizar un ajuste preciso de cada resistencia) los potenciómetros rotatorios (los más comunes por su extensa vida útil y su tamaño pequeño) y los potenciómetros lineales. Asimismo, es posible hallar potenciómetros logarítmicos; otros que se conocen como senoidales y una línea de potenciómetros que se identifican como antilogarítmicos.

Además de los mencionados líneas arriba, se puede hacer uso de potenciómetros múltiples (destinados, por lo general, a autorradios e instrumentación) y de potenciómetros digitales, los cuales constan de un circuito integrado que recrea el mecanismo de los potenciómetros analógicos y se controlan por medio de una interfaz.