Tipos de resistencias eléctricas


Las resistencias de tipo eléctrico se caracterizan por obstaculizar o hacer más difícil el paso de una corriente en el marco de un circuito eléctrico de carácter cerrado. A partir de ellas, pues, los electrones o cargas eléctricas no pueden circular con libertad sino que su recorrido se frena o atenúa en función del poder que ejerza la mencionada resistencia.

Como no existe una única clase de resistencia eléctrica, en esta oportunidad hemos optado por describir las posibilidades existentes al respecto con el propósito de ayudarlos a conocer con mayor detalle a estos elementos.

En primer lugar, resulta interesante resaltar que es posible distinguir tres grandes conjuntos de resistencias: el de las resistencias fijas, el de las variables y el de las resistencias dependientes de la temperatura. Este último grupo, según señalan fabricantes y consumidores de estas piezas, está compuesto por dispositivos identificados con el nombre de termistores que tienen la particularidad de tener tanto coeficientes negativos de temperatura (conocidos como NTC, sigla que simplifica el concepto de Negative Temperature Coefficient) como positivos (llamados PTC, sigla que corresponde a la expresión inglesa Positive Temperature Coefficient).

Asimismo, se las puede analizar bajo el punto de vista de sus componentes y hablar entonces de resistencias de película de carbón (empleado para valores de dos watios como máximo), de películas metálicas (uno de los modelos más actuales, capaz de tener una vida útil más extensa que los dispositivos más antiguos), de carbón aglomerado, de metal vidriado y de resistencias de hilo bobinado, entre muchas otras.