Para aprender más sobre los seres vivos y enriquecer nuestros conocimientos al respecto, resulta apropiado ir desde lo más general a lo más concreto. Por eso, en Tipos.com.mx abordamos la temática después de haber hecho referencia a la definición de ser, una palabra con múltiples acepciones.
Ahora, la idea es recordar que es un ser vivo pero, al mismo tiempo, ofrecer información sobre los diferentes organismos que pueden encontrarse en la Tierra, un planeta donde existen numerosas formas de vida.
En este sentido, se puede decir que la expresión identifica a los especímenes que poseen una estructura física compleja en la cual se conjugan átomos y moléculas. Estos ejemplares tienen la particularidad de vincularse con el entorno a partir de intercambios de energía y de materia, así como de subsistir de manera independiente gracias a funciones indispensables para la vida como lo son la nutrición, la respiración y la reproducción.
Claro que no todos los seres vivos son iguales: el hábitat, la apariencia, los modos de relacionarse con el ambiente y la forma de alimentarse, entre otros factores, contribuyen a diferenciarlos entre sí.
Ya hicimos alusión a los seres. También mencionamos a los seres vivos. Ahora, entonces, llega el momento de profundizar en el tema y centrar la atención en las categorías que se reconocen a nivel general para favorecer el reconocimiento de los organismos.
Hay dominios, reinos, órdenes, familias, especies… La clasificación, de acuerdo a los expertos, comienza por reconocer a los integrantes de los conjuntos Archaea, Bacteria, Protista, Fungi, Plantae y Animalia. A partir de allí, se puede hablar de organismos unicelulares y pluricelulares, de procariontes y eucariontes y de autótrofos y heterótrofos, por mencionar algunas alternativas que permiten achicar el margen de estudio a fin de concentrar el aprendizaje sobre los seres vivos.