Tipos de impuestos


Se define como impuesto al tributo regido por derecho público que se exige en función de la capacidad económica de quienes están obligados a pagarlo y no requiere ningula clase de contraprestación por parte del acreedor. Se trata, pues, de un cargo obligatorio demandado a personas físicas y a empresas para financiar el Estado. Algunos de ellos poseen fines estrictamente fiscales, mientras que otros se consideran como extra-fiscales y, algunos, se utilizan con finalidad mixta entre ambos propósitos.

De acuerdo a sus orígenes, particularidades y finalidades, el impuesto se divide en múltiples categorías y adquiere diferentes formas. Existe, por ejemplo, un impuesto conocido como Ad Valorem que se caracteriza por ser el impuesto básico de un bien, servicio o propiedad. Dentro de este grupo se contemplan los impuestos de ventas, los impuestos de herencia y los impuestos al valor agregado.

También hay impuestos directos (aquellos que gravan las fuentes de capacidad económica), indirectos (gravado sobre consumos y gastos), revolucionarios (sistema desarrollado por organizaciones terroristas para financiarse por medio de extorsión y amenazas), impuestos de producto, impuestos personales e impuestos sobre la renta.

Cabe destacar además que, de acuerdo a la variación de la cuantía porcentual, los impuestos pueden ser definidos como planos o proporcionales, progresivos y regresivos.

Por otra parte, resulta interesante resaltar que en diversos países existen impuestos sobre el valor agregado (conocido con la sigla de IVA), impuestos sobre sociedades, impuestos sobre hidrocarburos, impuestos sobre actividades económicas, impuesto a los depósitos en efectivo e impuestos sobre transmisiones patrimoniales, entre otros.