Tipos de contratos de trabajo


En el ámbito laboral formal, las relaciones entre empleadores y empleados están reguladas por diversos tipos de contratos. Esta clase de convenio que se establece por escrito para dejar una constancia de responsabilidades y obligaciones entre ambas partes contempla una amplia variedad de modalidades de trabajo.

Así, entonces, a la hora de darle empleo a un individuo se hace uso del contrato individual de trabajo, mientras que si se trata de un lazo que une a uno o más empleadores (ya sean empresas u organizaciones) con algún sindicato que agrupa a numerosos trabajadores, se habla de contrato colectivo de trabajo.

En el caso de los contratos firmados con cada trabajador en particular, también se tiene en cuenta el tipo de puesto ofrecido y los plazos que requiere quien lo contrata. De esta manera, se puede hacer uso de un contrato a largo plazo (también denominado plazo fijo) o apelar a un contrato de trabajo por temporada si se trata de una actividad para la cual se ha fijado un periodo en particular. De ser una oferta basada en una jornada de trabajo menor a la habitual, entonces se suele firmar un contrato de tiempo parcial.

Cabe resaltar que, más allá del tipo de contrato pautado, en todos los casos suele existir un periodo de prueba (estipulado en tres meses) que le brinda al empleador la posibilidad de rescindir el contrato con el trabajador sin causa y sin que éste tenga derecho a reclamar una indemnización monetaria.

Además de los mencionados, existen a nivel general (al respecto, hay que decir que cada país contempla modalidades determinadas de contratos) convenios de trabajo eventual y contratos de trabajo a domicilio, entre otros.