Cuando varias personas se congregan en un lugar para plantear, analizar, discutir y votar un determinado asunto para arribar a una solución o medida concreta, se hace alusión al concepto de asamblea.
Esta palabra, además, se aprovecha en el campo militar para describir a la concentración de diversas tropas con fines de instrucción y al toque que se da con el propósito de formar las tropas.
De acuerdo a cómo y por qué surjan, las asambleas pueden enmarcarse en distintas categorías. A continuación, un repaso por diferentes modalidades que permiten tener presente la amplia variedad de asambleas existente.
Si son los integrantes del Poder Legislativo los protagonistas de la reunión, por citar un caso puntual, se hablará de asamblea legislativa.
Cuando son los ciudadanos los que se unen a debatir para fijar pautas de convivencia entre sus representantes y ellos como pueblo originando una Constitución, entonces se la define como asamblea constituyente. A lo largo de la Historia se han distinguido en el mundo tanto asambleas constituyentes institucionalizadas como asambleas constituyentes no institucionalizadas.
Muchas veces, además son los delegados de los gremios quienes convocan a asambleas para establecer junto a los trabajadores las medidas a tomar y los pasos a seguir para hacer valer sus derechos y tener las mejoras que plantean para defender sus fuentes de ingresos.
Más allá de estas alternativas, es posible distinguir según el ámbito, las motivaciones y las circunstancias que promuevan el desarrollo de una reunión con debate y votación a las asambleas populares, a las asambleas generales, a las asambleas ordinarias y a las asambleas regionales, entre muchas otras.