Tipos de ahorro


Se conoce como ahorro a la acción de ahorrar (término que está relacionado al esfuerzo por evitar gastos o consumos así como también a la reserva de dinero para hacer uso de él ante eventuales necesidades y a la voluntad para evitar ciertos trabajos, riesgos y/o dificultades).

Esta práctica basada en hacer que entre el dinero disponible y el consumo de una persona exista una diferencia monetaria para guardar puede tener distintas particularidades y llevarse a cabo en distintos ámbitos.

De concretarse en el marco de una empresa, una institución sin ánimo de lucro o de una familia, por ejemplo, se lo denomina ahorro privado. En cambio, si lo realiza el Estado recibe el nombre de ahorro público.

Si se suman los montos del ahorro público y el privado, se llega al concepto de ahorro nacional, el cual se puede definir al calcular la diferencia entre el valor de bienes producidos y el consumo.

Cabe destacar que, más allá de las nociones de ahorro vinculadas al lenguaje financiero (contexto en el cual también adquieren relevancia expresiones como caja de ahorro, ahorros en moneda extranjera y ahorro en plazo fijo), existen otras clases de ahorro que guardan relación con el consumo controlado de distintos servicios y recursos no sólo por cuestiones monetarias sino también por motivaciones ecológicas. Dentro de este conjunto se agrupan las ideas de ahorro energético, ahorro de agua, ahorro de combustible y ahorro de papel, por citar algunas.

Asimismo, es habitual valerse del vocablo en la vida cotidiana para construir expresiones como “No ahorró elogios para el médico que le salvó la vida a su hijo” y “Ahorro días de vacaciones para disfrutarlos más adelante”.