Impresionante la cantidad de categorías que adquieren relevancia cuando se busca información acerca de las sustancias. Incluso una vez que se cree que delimitar los datos es establecer a las sustancias químicas como eje de una investigación o trabajo, aparecen muchas otras alternativas que demuestran la diversidad de opciones en materia de sustancias.
Hoy, a fin de ayudarlos a ampliar sus conocimientos, haremos hincapié en las particularidades y ramificaciones de las sustancias puras.
Estas sustancias, dicen los expertos, poseen una conformación química homogénea y no pueden segmentarse por medio de experimentos físicos pero sí pueden llegar a descomponerse a través de una reacción química. Pueden ver modificada su fase (es decir, se las puede encontrar en estado líquido, sólido o gaseoso), pero su temperatura no varía.
Sobre los estados de las sustancias puras, es interesante mencionar que, en el medio ambiente y en estado natural, a menudo se identifican casos de sustancias puras en dos fases: así ocurre, por citar una posibilidad, con el agua que puede al mismo tiempo ser hielo y vapor.
De buscar precisiones sobre estos preparados, descubriremos la existencia de sustancias puras simples y sustancias puras compuestas. Las primeras se conforman a partir de átomos pertenecientes a un mismo tipo de elemento, mientras que en las segundas se advierte la presencia de átomos de múltiples elementos. En este contexto se habla de elementos (sustancias imposibles de reducir, forman parte de la tabla periódica) y compuestos (aquellos materiales logrados con proporciones fijas de diferentes elementos que pueden ser descompuestos a través de procedimientos químicos).