El concepto de fuerza abarca diversos ámbitos ya que posee un significado amplio y, por lo tanto, hace referencia a situaciones y propiedades distintas. De este modo, mientras alguien lo puede entender como sinónimo de vigor o capacidad para mover algo con peso o resistir un empuje, otro lo puede interpretar como el esfuerzo de una persona para superar obstáculos y dificultades.
De igual manera, puede resaltarse que, así como para la Física la fuerza posee determinados sentidos, para el ámbito de las Ciencias Sociales, Políticas y del Derecho también tiene otros.
Existen, por lo tanto, expresiones técnicas y especializadas derivadas del vocablo como lo son la fuerza central, la centrípeta, la de empuje horizontal, la conservativa, la gravitatoria, la fuerza electromagnética, la fuerza nuclear, la elástica, la electrostática y la fuerza de rozamiento, por citar sólo algunas de las categorías que enriquecen al concepto.
Sin llegar a profundizar en el mencionado término también es posible reconocer nociones como las de fuerza centrífuga (fuerza ficticia que se hace presente al describir el movimiento de un cuerpo en un sistema de referencia en rotación), fuerza G (medida intuitiva de aceleración), fuerza muscular (aquella que se genera a partir de la contracción de los músculos del cuerpo), fuerzas armadas (las pertenecientes al Estado y segmentadas en fuerza aérea, naval y terrestre), fuerza de seguridad, fuerza pública (grupo con autoridad para garantizar el orden en la vía pública) y fuerza de voluntad (energía y capacidad de alguien para superar todo tipo de inconvenientes).