El concepto de sistema de información se utiliza para mencionar al grupo de elementos que permite organizar, interpretar y administrar datos con el fin de satisfacer un determinado requerimiento.
En este contexto pueden interactuar categorías como las relacionadas a personas, recursos técnicos y referencias teóricas para permitir el procesamiento de datos y llegar, de este modo, a optimizar los tiempos y actividades de una entidad.
A nivel genérico, puede decirse que los sistemas de información se dividen de acuerdo a sus características y complejidades en entornos transaccionales y entornos decisionales, así como también en sistemas competitivos, sistemas cooperativos y sistemas que transforman el estilo operativo de un negocio, aunque existen clasificaciones más concretas que ayudan a conocer y a identificar mejor a cada tipo de método.
Bajo el modelo de pirámide y en un escenario asociado al rubro empresarial, es posible encontrar un sistema de procesamiento de transacciones (para gestionar las operaciones llevadas a cabo en una compañía), un sistema de información gerencial (enfocado a hallar soluciones a problemáticas corporativas), un sistema de soporte a decisiones (útil a la hora de tomar medidas sobre el negocio) y un sistema de información ejecutiva (recurso que utiliza información interna y externa para controlar a nivel gerencial el estado de cada área de la firma).
Cabe destacar que, con el paso de los años, a estas propuestas se le sumaron otras, entre las que pueden citarse a los sistemas de automatización de oficinas, el de planificación de recursos, el sistema experto y los sistemas de información estratégicos.