Tipos de ondas sísmicas


Bajo el concepto de onda se encuadran múltiples acepciones, pero en esta oportunidad sólo haremos referencia a las ondas sísmicas, una variedad de ondas elásticas que se basan en la propagación de perturbaciones temporales del campo de tensiones que en un determinado medio provocan pequeños movimientos.

Estas ondas, dicen los expertos, pueden ser ocasionadas por movimientos telúricos naturales o bien de modo artificial por medio del empleo de explosivos o camiones vibradores. Son útiles, por ejemplo, para la exploración petrolera.

En función de los orígenes y las características de las ondas sísmicas, es posible descubrir numerosas subdivisiones. Hay, por ejemplo, ondas sísmicas de cuerpo (que tienen la particularidad de ser internas y transmitir los temblores preliminares de un terremoto pero carecen de poder destructivo) y ondas sísmicas superficiales (las cuales causan daños durante los sismos).

A su vez, las primeras de las ondas sísmicas mencionadas se segmentan en ondas primarias (ondas longitudinales o compresionales identificadas con la letra P que pueden viajar a través de cualquier material líquido o sólido) y secundarias (ondas bautizadas como S en las cuales se producen desplazamientos transversales en relación a la dirección de propagación) y las restantes dan lugar a ondas másicas (aquellas que tienen como medio de propagación a la masa de la Tierra), oscilaciones libres (sólo ocurren en terremotos fuertes), ondas de Love (aquellas que provocan en la superficie movimientos de corte horizontales) y ondas Rayleigh (también conocidas como ground roll y asociadas con movimientos elípticos retrógrados del suelo, más lentas que las ondas de cuerpo).