El concepto de pulpo se aprovecha para identificar a los moluscos cefalópodos de grandes dimensiones que poseen, entre otras particularidades, varios tentáculos dotados con ventosas. Estas criaturas marinas tienen una importancia que va más allá del reino animal ya que son valorados en la gastronomía por su carne y fuentes de inspiración dentro del ámbito artístico.
En Galicia, por ejemplo, uno de los platos más tradicionales es el pulpo a la gallega, mientras que en suelo mexicano suelen deleitarse con pulpo a la campechana.
Si hacemos foco en las especies, entonces podemos distinguir entre el género Hapalochlaena (comúnmente bautizados como pulpos de anillos azules), el género Grimpoteuthis (más conocidos por su apariencia como pulpos elefantes o pulpos Dumbo) y el género Enteroctopus al cual pertenece el llamado pulpo del Pacífico Norte (también destacado como pulpo gigante de California). Tampoco se puede dejar de mencionar al pulpo manta, conjunto dentro del cual aparecen cuatro especies que habitan océanos tropicales y que se diferencian de los demás por las amplias membranas que, para defenderse, despliegan las hembras cada vez que se sienten en peligro. El molusco denominado pulpo mimético, en tanto, sorprende con su habilidad para imitar con facilidad la apariencia de alrededor de quince especies marinas.
Los más memoriosos, por otra parte, recordarán a Paul, un pulpo común que alcanzó una gran popularidad mundial cuando se lo utilizó para pronosticar cómo saldrían los partidos del Campeonato Mundial de Fútbol 2010. Más atrás en el tiempo, la ficción nos regaló un personaje entrañable creado por el estudio de animación Hanna-Barbera que, en español, se conoció con el nombre de Pulpo Manotas.