El concepto de ligando se emplea en el campo de la Química para hacer alusión a una molécula de pequeñas dimensiones que junto a una biomolécula conforma un complejo. Cuando se vincula a un átomo de metal central forma un complejo de coordinación, de acuerdo a los expertos en el tema.

Los ligandos simples, según se desprende de la teoría, son monodentados porque desarrollan un único enlace con el átomo central, pero también hay ligandos más complejos clasificados como bidentados, tridentados, etc. por su capacidad de establecer numerosos enlaces de coordinación.

Al profundizar nuestros conocimientos en torno a este tema, además, encontramos otras categorías, entre las cuales aparecen la de los ligandos dadores Π (se caracterizan por ser electronegativos y por su capacidad para estabilizar metales de transición que poseen elevados estados de oxidación) y la de los ligandos dadores σ (logran darle estabilidad al estado de oxidación más equilibrado de la primera serie de transición).

Asimismo, existen los ligandos dadores σ y aceptores Π que pueden estabilizar estados bajos de oxidación (como los casos del nitrógeno, los cianuros y el monóxido de carbono, por señalar algunos ejemplos a modo de referencia) y complejos Π que se diferencian de todos los grupos señalados líneas arriba por ser un conjunto especial de ligandos dadores σ aceptores Π. Ellos pueden estabilizar estados bajos de oxidación aunque la interacción la tienen con una nube, en otras palabras, con una densidad electrónica excesiva de la molécula, como ocurre por señalar una posibilidad, con la nube electrónica compuesta a partir de una molécula con enlaces Π.