Las heladeras (también conocidas con los nombres de nevera, refrigeradora y frigorífico) son artefactos comunes que se encuentran en viviendas particulares, locales gastronómicos, hoteles y hasta en centros de salud. Las podemos reconocer a simple vista por su apariencia o su función, pero es interesante profundizar nuestros conocimientos al respecto para descubrir que cada una tiene particularidades que la hacen única no solamente por su tamaño o diseño sino también por la tecnología y las ventajas que ofrece.

En la actualidad es posible comparar y elegir muchas marcas y modelos de heladeras. Algunas vienen con freezer (ya sea en la parte inferior o superior); otras no. Unas son verticales (las más comunes para uso doméstico), en cambio en comercios donde se venden helados, hielo o ciertos productos refrigerados se observan por lo general heladeras de disposición horizontal. Las más grandes requieren electricidad, energía solar o gas para funcionar y se instalan en un lugar de manera fija, mientras que las heladeras portátiles no llevan cables y pueden ser transportadas con facilidad sin perder sus propiedades térmicas.

Hay, asimismo, heladeras de una y más puertas, así como heladeras convencionales y heladeras modernas tipo smart, también conocidas como heladeras inteligentes. Tampoco se puede dejar de lado a las heladeras de diseño, las cuales cumplen la función de una nevera común pero tienen una apariencia original, con formas, colores y hasta estampados de mucha creatividad.

Existen, por último, las heladeras mini. Algunas de estas miniaturas son reales y funcionan, pero otras son de plástico y forman parte del conjunto de electrodomésticos de juguete que se fabrican con fines de entretenimiento infantil.