Muchos artistas de renombre mundial encuentran en la guitarra a la compañera perfecta para ponerle música a las letras de sus canciones. Este instrumento de cuerda constituye una familia interesante que ofrece numerosas opciones para que cada uno encuentre el elemento más apropiado para sumar sonido a temas folclóricos, de rock o de flamenco, por enumerar algunas posibilidades.

La guitarra criolla es la más común. También se la conoce como acústica y es interesante señalar además que en este conjunto hay varios tipos de guitarras que se diferencian entre sí por cómo se elaboran, la clase de cuerdas que poseen y el diseño que presentan. La guitarra romántica, la guitarra barroca y la guitarra de flamenco, por ejemplo, llevan cuerdas de nailon, mientras que la guitarra sajona lleva cuerdas de metal. Hay, asimismo, guitarras especiales como la Pikasso I (confeccionada a mano) y la guitarra arpa (con una estructura atípica que combina la forma de una guitarra convencional y le añade rasgos de arpa).

La guitarra eléctrica, por su parte, es un instrumento que se segmenta en tres categorías: las de cuerpo hueco, las de cuerpo sólido (sin caja de resonancia) y las de cuerpo semisólido (poseen un bloque en el centro para impedir acoples).

Al profundizar los conocimientos en el tema adquieren relevancia además las guitarras electroacústicas, las guitarras MIDI, la guitarra rusa, la guitarra fretless, la guitarra barítona, la guitarra con doble diapasón, la guitarra horizontal, la guitarra sintetizador y la guitarra de siete cuerdas, por agregar otras posibilidades a modo orientativo.