Tipos de saturación


El diccionario de la Real Academia Española (RAE) ofrece una definición muy general del concepto de saturación, una palabra de origen latino que sirve para referirse al resultado de saturar algo. Sin embargo, al profundizar nuestros conocimientos en torno a este vocablo descubrimos que es una noción con numerosas aplicaciones que extiende su alcance a partir de una gran cantidad de clasificaciones.

La teoría del color, por ejemplo, marca la existencia de una saturación máxima y de una saturación mínima en relación a la intensidad de cada tonalidad cromática, mientras que al analizar las particularidades de los materiales ferromagnéticos gana relevancia la saturación magnética, un efecto capaz de limitar los campos magnéticos que se consiguen a través de electroimanes y transformadores.

Por otra parte, es interesante tener presente que el concepto de saturación cobra protagonismo en múltiples ramas de la Química, tales como la Bioquímica (donde alude a la fracción de los sitios de unión que, en un momento determinado, se encuentran ocupados), la Química Organometálica (marco en el cual se hace foco en la insaturación propia de numerosos catalizadores), la Fisicoquímica (ámbito donde se estudia la saturación de nitrógeno y se tiene en cuenta a la saturación base, por ejemplo) y la Química Orgánica (donde se trabaja sobre indicadores de insaturación y grados de saturación de compuestos).

En el plano musical, por último, la saturación sirve para reconocer al sonido en el cual es posible detectar cómo se distorsiona la señal sonora, ya sea de modo leve o como una falla bien marcada.