Tipos de premisas


El concepto de premisa, según se advierte al buscar sus aplicaciones prácticas y conocer las definiciones teóricas de esta palabra, está presente en los campos de la Lógica y la Filosofía para identificar a las proposiciones que permiten inferir una conclusión.

La premisa mayor, sostienen los filósofos, es la proposición inicial de un silogismo, mientras que la segunda está considerada como premisa menor.

En función del contenido de cada enunciado, por otra parte, tenemos la posibilidad de considerar a dicha frase como una premisa verdadera (si se niega o afirma algo que coincide con la realidad) o como una premisa falsa (cuando lo expresado no se corresponde con algo real). Asimismo, pueden surgir premisas contradictorias que generen confusión al analizar un par de proposiciones que, por lo que afirman o niegan, resultan incompatibles. Los razonamientos y la recolección de información, por otra parte, nos ayudarán a comprobar si una premisa es válida o, por alguna razón, debe ser considerada como inválida.

De profundizar nuestros conocimientos sobre el tema también lograremos diferenciar entre premisas relevantes y premisas irrelevantes, y catalogar a cada una de acuerdo a la materia abordada o a la finalidad que persigan. En este último caso, ganarán relevancia las premisas jurídicas (relacionadas al Derecho), las premisas tecnológicas (vinculadas a cuestiones de innovación y uso de la tecnología), las premisas de planeación, las premisas de negociación, las premisas matemáticas (asociadas al pensamiento matemático) y las premisas de sentido religioso (inspiradas en algún credo), por enumerar algunas posibilidades a modo de referencia.