Tipos de pipetas


Se define como pipeta a un elemento presente, por lo general, en laboratorios que ofrece la posibilidad de medir con un gran nivel de precisión una parte del volumen de un líquido sometido a pruebas varias. En otras palabras, puede decirse que se trata de un tubo (usualmente, fabricado en vidrio) que permite transportar pequeñas cantidades de sustancias líquidas o bien conservar un líquido sin que la presión de la atmósfera provoque su salida.

Cuando los especialistas necesitan trabajar con más de un líquido, suelen aprovechar las micropipetas, unas piezas que no exigen la higienización continua del elemento porque poseen puntas plásticas descartables que pueden intercambiarse. Ests micropipetas pueden ser clasificadas, en función de sus particularidades y las ventajas que ofrezcan, como manuales (el proceso lo hace el experto a partir de la pulsación de un botón), automáticas (con un dispositivo digital para realizar la succión), simples (admiten una única punta por vez) o multicanales (permiten trabajar con varias puntas de manera simultánea).

Resulta interesante mencionar también la existencia de pipetas de transferencia (las más empleadas en los bancos de sangre) y las pipetas serológicas (dotadas con un filtro que sirve como protección y garantiza que no se propague la sustancia depositada en su interior), dos variedades que le aportan diversidad al producto y se diferencian por sus propiedades y usos de las pipetas volumétricas.

Por fuera de los laboratorios, asimismo, se pueden hallar pipetas fáciles de utilizar (no requieren demasiada preparación previa o conocimientos científicos) para, por ejemplo, aplicarle a los canes soluciones anti-pulgas, garrapatas y mosquitos.