Tipos de gustos


A diario podemos emplear u oír expresiones como “estar a gusto”, “mucho o tanto gusto”, “buen gusto” o “mal gusto”, así como tenemos la posibilidad de entrar a una heladería y encontrar una amplia variedad de gustos.

gustoEsta palabra, según se advierte al repasar las definiciones aceptadas por el diccionario de la Real Academia Española (RAE), posee múltiples interpretaciones: por lo tanto, es interesante recordar qué clasificaciones tiene el término en función de cada una de sus acepciones.

Si hacemos foco en el sentido del gusto que se asocia a la capacidad de distinguir sabores podremos identificar, por ejemplo, al gusto adquirido, tal como se conoce a las texturas y aromas de bebidas o comidas que se consideran familiares por estar acostumbrados a ellos. Además, al degustar un alimento estamos en condiciones de reconocerlo como ácido, amargo, dulce o salado en función del gusto predominante.

La sensibilidad estética, en tanto, nos lleva a distinguir varios gustos artísticos. A partir de ellos, la gente puede valorar una obra de arte o reconocer la calidad de una composición musical, por indicar dos alternativas a modo orientativo.

A cada edad, en tanto, la población tiene gustos, es decir, preferencias, hábitos y pasatiempos, diferentes. Se abre entonces un abanico de gustos infantiles (entretenerse con juguetes, dibujar y pintar, jugar en la plaza, ver dibujos animados), gustos juveniles (asistir a recitales, leer, escuchar música, ver series o novelas) y gustos típicos de adultos (ir a cenar en pareja, ir al cine o al teatro, inscribirse en talleres de arte, etc).